Aguado, de Miranda y de Justo sobresalen en la temporada que se desgranó gracias al Círculo Taurino de Osuna
Con una charla coloquio se da por finalizada una temporada que en Osuna tendrá un último retazo el próximo 2 de noviembre
El Círculo Cultural Taurino de Osuna volvió a contar con el beneplácito de la fiel afición de nuestra localidad en una charla coloquio que vino a hacer un resumen de la temporada que nos ocupa.
En la mesa moderada por el periodista Juan Belmonte, el apoderado Julián Guerra fue sustituido por Maurice Berho, quien actualmente gestiona la carrera de su compatriota Juan Leal.
Berho destacó el papel jugado por Pablo Aguado, David de Miranda o Emilio de Justo, «quienes han demostrado que los triunfos sirven, ya que se han visto anunciados en la mayoría de ferias importantes tras sus triunfos».
También valoró a toreros ya consagrados como Ferrera, Cayetano o Ponce, quienes también han tenido un lugar destacado. El francés recalcó el hecho de que hay un buen ramillete de toreros incipientes que están moviendo el toreo y pidiendo paso. No se dejó atrás percances como los sufridos por Ponce, Roca Rey, Rafaelillo o el torero que le tomó la palabra en la Casa de la Cultura.
Juan Leal, por su parte, comentó que los triunfos de la temporada anterior le abrieron la puerta durante la temporada de nuevas ferias. El mismo día en que cortaba oreja y pagaba con sangre en Madrid, lo llamaban para hacer el paseíllo en Pamplona. El francés decarló que no se siente encasillado en corridas duras, sino que percibe que esa etapa ya está pasada porque este año ha matado hierros de otro calado. El francés se identifica con el toreo del sanluqueño Paco Ojeda por los sitios que pisaba y su actitud como torero. Bilbao supuso el comienzo de su despegue y este año lo ha ratificado cortando dos orejas. El torero se dejó querer por el público asistente y dijo que por qué no verse anunciado en el coso de San Arcadio.
También tomó la palabra Ángel Jiménez, quien confesó que «el día de la alternativa me dejé llevar. Nunca imaginaba lo que iba a ocurrir». Todo comenzó a velocidad de vértigo en la carrera del ecijano. Tuvo que digerir su triunfo en la Maestranza en las novilladas de Canal Sur, una celeridad que dio paso a muchos meses de poco toreo, pero nunca desfalleció y no cejaba en su empeño de volver a entrar en el circuito.
Fue clave una llamada al matador retirado José Luis Moreno, quien le ofreció la oportunidad de acudir al campo donde le presentó a Enrique Peña, su actual apoderado, quien consiguió colocarlo en Madrid, donde aprovechó su oportunidad.
Fotografías: Jaime Ruíz Pigne.
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