Marketing relacional: la clave para el éxito del e-commerce
Llegar a un cliente en la red siempre es un reto complejo. Si ya en los inicios del e-commerce era difícil lograr que una persona comprara tu producto e, incluso, hiciera una segunda y tercera compra, la realidad actual nos muestra un mercado mucho más competitivo que nos obliga a ser creativos y metódicos, entre otros aspectos.
Como ventaja, ahora disponemos de muchos más canales para llegar a nuestro público objetivo. También contamos con todo tipo de herramientas para segmentar mejor nuestros mensajes o para medir los resultados y optimizar nuestra estrategia.
Dentro de la estrategia de marketing digital que diseñemos, el marketing relacional debe contar con un papel protagonista para aumentar la tasa de conversión con nuestras acciones y para fidelizar a los clientes que ya han tenido una experiencia anterior con nuestra marca, empresa o producto.
Si te has propuesto el objetivo de conquistar por mucho tiempo a tus clientes, te recomendamos que te pongas en las manos de una empresa de marketing relacional para conseguirlo.
¿Cómo se construyen las relaciones con nuestros clientes?
Como ocurre con cualquier tipo de relación, construirlas no es flor de un día. Es por ello que el marketing relacional tiene en cuenta que, con un único impacto, es prácticamente imposible fidelizar a un cliente.
Así, serán necesarias acciones diferentes y bien diseñadas y programadas para que, poco a poco, un cliente que ha hecho una primera compra te siga de cerca hasta que formes parte de su ecosistema de compras. Todo está pensado para lograr relaciones duraderas en el tiempo, para que un cliente puntual multiplique sus compras en períodos de tiempo largos o para que ese mismo cliente se acabe convirtiendo en un embajador o prescriptor de tu marca.
Aquí os mostramos algunos de los canales, herramientas o acciones más comunes:
- Redes sociales: en los últimos años, las redes sociales se han convertido en un gran canal de relación con potenciales clientes o clientes reales. Sin embargo, es importante aclarar que la evolución de cada red o la aparición de nuevas hace que las acciones de marketing relacional estén muy bien pensadas para cada red y cada público. Con una buena estrategia, dispondremos de un canal perfecto para llegar a clientes y fidelizar a los existentes.
- Productos personalizados: el marketing relacional busca una relación especial con el cliente. Por eso, es esencial segmentar y, además, personalizar. Ofrecerle productos a medida para ellos, en los que pueda elegir o personalizar elementos o incluir su nombre, por ejemplo, son un paso más para la fidelización.
- Programas de fidelización: otro ejemplo que nos puede conducir a una relación duradera con el cliente es el reconocimiento a su fidelidad. Así, si a medida que van sumando compras el cliente observa que recibe ventajas exclusivas, descuentos, promociones o acciones personalizadas, sentirá que su relación con la marca es cada vez más sólida y beneficiosa para ambos.
Estos son solo algunos ejemplos de canales o acciones que el marketing relacional utiliza para conservar a los clientes de una empresa. Los clientes deben situarse siempre en el centro de nuestra estrategia, sentirse protagonistas, cuidados y acompañados. Y, por supuesto, deberemos estar siempre muy atentos a los cambios y oportunidades del mercado, o a los pasos de la competencia para mantener a nuestra comunidad a nuestro lado.
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Fundado el 24 de noviembre de 2006 en Osuna (Sevilla).