El obispo auxiliar de Sevilla, Ramón Valdivia, predicó la Función Principal de San Arcadio patrón de Osuna
Redactora de El Pespunte
Ayer, 12 de enero, el pueblo de Osuna se congregó en la ermita de San Arcadio para participar en la solemne Función Principal, presidida por el obispo auxiliar de la Archidiócesis de Sevilla y natural de Osuna, Ramón Darío Valdivia Giménez, convirtiéndose en un hecho histórico, ya que fue la primera vez que un obispo visitó San Arcadio, marcando así un hito en la tradición local.
La eucaristía de la Función Principal comenzó a las 12 del mediodía, donde monseñor Valdivia destacó la vida y el martirio de San Arcadio, enfatizando la importancia de seguir su ejemplar camino. Hizo hincapié en la lectura del primer libro de Samuel, que relata la renuncia de la comunidad hebrea al reinado de Dios, a excepción de Samuel, quien lamentó el rechazo de Dios por parte de la comunidad. En sus palabras, el obispo auxiliar de Sevilla predicó: «Quizás hay otros reyes en nuestra vida que estamos buscando, otras satisfacciones que no son las de Dios. El hombre está creado para alabar a Dios», recordando la necesidad de confiar en Dios en lugar de depender de poderes terrenales. Además, el coro de Santo Domingo tuvo una participación destacada con una canción compuesta por ellos tras finalizar la eucaristía.
Ya por la tarde, tuvo lugar la procesión de San Arcadio a las 18:30, que recorrió las calles de Osuna acompañada de la Agrupación Musical Santa María Magdalena de Arahal. La procesión fue presidida por la representación de todas las hermandades, la corporación municipal, el vicario episcopal Manuel Ávalos, el hermano mayor de San Arcadio, el presidente del Consejo Local de Hermandades y Cofradías, y el director espiritual del Triduo Eucarístico de esta festividad, Antonio Raúl Moreno Enríquez. Todos mostrando su compromiso con la fe y agradeciendo la protección de San Arcadio.
Redactora de El Pespunte
