Villarreal CF 1-2 Real Betis | Victoria pese a la soberbia de Cuadra Fernández
El Real Betis Balompié logró una victoria de mucho mérito frente al Villarreal en un duelo marcado por el esfuerzo y la polémica. A pesar de jugar en inferioridad numérica desde el minuto 34 por la expulsión de Chimy Ávila, el equipo de Manuel Pellegrini se impuso por 1-2 gracias a un juego sólido en la primera mitad y a una resistencia titánica en los minutos finales.
El choque no estuvo exento de controversia, con una actuación arbitral de Cuadra Fernández que dejó mucho que desear y generó indignación en el bando verdiblanco.
Superioridad bética hasta la expulsión
El Betis empezó el partido con autoridad, imponiendo su ritmo y manejando el balón con criterio gracias al liderazgo de Lo Celso en la creación. En el minuto 32, el joven delantero Vitor Roque adelantó a los visitantes culminando una jugada colectiva bien elaborada.
Luego fue un chispazo del astro argentino el que amplió distancias. En el minuto 47, Giovani Lo Celso, en un momento de inspiración, anotó un precioso gol de falta directa que dejaba clara que el equipo no iba a achicarse frente a las circunstancias.
En el minuto 34, Chimy Ávila fue expulsado de manera totalmente desproporcionada tras una acción que no parecía merecedora ni siquiera de una tarjeta amarilla. Esta decisión, tomada por un Cuadra Fernández que no dudó en mostrar la roja directa, cambió radicalmente el curso del partido y obligó al Betis a replegarse para defender su ventaja.
Cuadra Fernández, el protagonista negativo
La expulsión de Ávila fue solo el inicio de una actuación arbitral muy cuestionable. Cuadra Fernández, lejos de mantener un criterio justo, pareció ensañarse con el conjunto bético, tomando decisiones que perjudicaron claramente a los de Pellegrini.
El momento más polémico llegó en el segundo tiempo, cuando el árbitro señaló un penalti en contra del Betis por una supuesta mano de Lo Celso en el área. Sin embargo, tras una decisión bien tomada del árbitro asistente, el gol quedó anulado al detectarse un fuera de juego previo. La falta de rigor de Cuadra Fernández en estas acciones, sumada a su actitud desafiante hacia los jugadores del Betis, generó una atmósfera de tensión constante en el terreno de juego.
Resistencia y victoria en inferioridad
A pesar de jugar con un hombre menos durante más de una hora, el Betis supo reorganizarse defensivamente y resistir los ataques del Villarreal. El equipo local logró recortar distancias en el marcador gracias a un gol de Álex Baena, pero los verdiblancos se mantuvieron firmes en los minutos finales.
El trabajo colectivo fue clave para sostener el resultado, con una defensa que se mostró sólida a pesar de la presión del Villarreal, y un mediocampo que, liderado por un incansable Lo Celso, ayudó a contener las acometidas rivales.
La victoria en La Cerámica tiene un enorme valor no solo por los tres puntos, sino por las circunstancias en las que se consiguió. El Betis demostró carácter, sacrificio y calidad para superar las adversidades y llevarse un triunfo que refuerza sus aspiraciones europeas.
Sin embargo, la actuación de Cuadra Fernández deja un sabor amargo, siendo un lastre innecesario para un partido que debía haber sido decidido exclusivamente por los jugadores. La expulsión de Chimy Ávila, el penalti anulado y la actitud del colegiado hacia los béticos evidencian una falta de criterio que perjudicó notablemente a los de Pellegrini.
A pesar de todo, el Betis logró salir victorioso, mostrando una vez más que este equipo está preparado para superar cualquier obstáculo, incluso los que llegan desde el arbitraje.
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