Un Domingo de Ramos deslucido por el solano de Osuna
Calurosa y apetecible se presentaba la mañana en Osuna para un Domingo de Ramos que será el único día donde tendremos tranquilidad, si meteorológicamente nos referimos. Pero la tarde se frustró cuando el solano de Osuna comenzó a aparecer de manera leve a primera hora de la tarde y ya más fuerte de lo normal al final de la misma y comienzo de la noche.
Todo ello no impidió que la Hermandad del Dulce Nombre, entrada triunfal de Jesús en Jerusalén y María Santísima de los Desamparados realizasen su estación de penitencia por las calles de Osuna. Una estación de penitencia que comenzó con 10 minutos de atraso debido a que la Banda de “Santo Ángel Custudio” que acompañó a “la Borriquita” llegó más tarde de lo citado.
Producida la salida de la Cruz de Guía, nueva y tallada el año pasado, le sucedía el paso del Dulce Nombre, que este año era innovador ya que abandonó el paso a ruedas y por primera vez, unos jóvenes costaleros se echaron a los hombros el antiguo paso de la entrada triunfal en Jerusalén y colocando a la imagen del Dulce Nombre. Un paso adornado con claveles y liliums blancos con unas típicas esparragueras entrelazadas en los candelabros de las esquinas y unos cuántos espárragos detrás de la imagen. Una imagen que perdió la cúpula para que pudiese procesionar en este paso, pero recuperando los cuatros angelitos que encontraban encima de la misma, situándolos en las cuatro esquinas de la peana del Dulce Nombre.
Un paso que estuvo acompañado en la salida por el Hermano Mayor de la Hermandad, José Antonio Herrera y los capataces de los pasos de la entrada triunfal en Jerusalén y la Virgen de los Desamparados. Después de la preciosa salida del paso del Dulce Nombre por parte de los jóvenes costaleros y de la mano del capataz José Antonio Ruíz Moncayo y su contraguía Rafael Miguel González Pérez, continuó la salida del cortejo procesional con las insignias y los protagonistas, después de las imágenes titulares, que son los niños, que ataviados con las túnicas de los colores de la Hermandad, con palmas y olivos en los pasos de Cristo y cirios en el paso de la Virgen. Seguidamente el paso de la sagrada entrada triunfal en Jerusalén quien continua en su paso con el tallado de los respiraderos y la canastilla. Un paso que estaba adornado con claveles rojos y un olivo, más pequeño de lo normal debido a la complicada salida si el olivo fuese más grande y seguidamente fue la Virgen de los Desamparados quien realizó su salida en un paso que fue el que más noto el solano de Osuna ya que en todo momento las bambalinas del palio estuvieron volando y hasta en ocasiones dobladas por completo.
La Hermandad llegó con puntualidad a todas sus citas, pero se retrasó unos minutos la llegada al palquillo debido a que cuando la Cruz de Guía estaba en Tía Mariquita y los representantes de la Hermandad esperando para recibir la venia para pasar por carrera oficial, los representantes del palquillo no estaban aún su lugar correspondiente ya que estaban esperando a la Alcaldesa que llegó cuando la cruz de guía estaba ya por el Casino de Osuna.
Exceptuando esa imprecisión, por lo demás la Hermandad estuvo correcta durante todo el recorrido y con momentos muy emotivos como fue la saeta que cantó Eduardo, un costalero y patero del paso de Cristo que se salió en la calle Hornillos para cantarle a la Virgen de los Desamparados.
La Hermandad llegó a las 22:30 h., hora exacta que tenían para la entrada, ya de noche y con el solano de Osuna sin amainar y aun más malo si cabe. Después de la entrada de los pasos de Cristo, llegó la Virgen de los Desamparados con más cuidados de lo normal ya que el manto se levantaba y tuvieron que arreglarlo de manera improvisa con dos varas de la Hermandad pero aun así no perdía la hermosura esta Virgen ataviada con una saya celeste y un manto color burdeos liso. Después de la entrada al templo, la Banda Municipal de Osuna, que está aumentando su caché por lo bien que está sonando, tocó la marcha mater mea dentro del templo como toque final a este Domingo de Ramos atípico por el viento de Osuna pero feliz porque significa que ya estamos en SEMANA SANTA.
Fotos: José Manuel Fernández Herrera