Un carmonense como pocos: la historia de Valentín Pinaglia Gavira

- Valentín Pinaglia lleva toda la vida regentando la administración de lotería más antigua de España y tras su jubilación se dedicará a Carmona con proyectos como recopilar todos los apodos de los carmonenses

Hoy hablamos de un carmonense orgulloso de serlo, autónomo incansable durante 43 años y amante, como pocos, de esta ciudad. Se define como una persona de carácter, leal y amiga de los suyos: Valentín Pinaglia Gavira.
Siempre ha intentado ser consecuente consigo mismo y con los demás, aunque muchas veces el corazón le haya jugado una mala pasada, añadiendo su lealtad a quien la merece y ofreciendo amistad de por vida a sus amigos de siempre.
La historia de su vida es la de la administración de Lotería Virgen de Gracia, la más antigua de España, que cumple este febrero 261 años. Esta administración era un pequeño cuartito en casa de su abuela, actualmente es la administración de la calle de San Pedro. Recuerda que “en aquella casa ya sentía ese pellizco con el olor a tinta al sellar la lotería, al ver a mi padre trabajar con los décimos y los loteros, o al llevar a la Ferretería de la Campana la lotería cada semana”.
Su destino estaba marcado a fuego, y desde niño estuvo rodeado de lotería, sintiendo esa conexión, ya que su familia la administraba desde 1985. Para él, “vender décimos en la administración de loterías más antigua de España ha sido todo un reto”.
Ha seguido la estela de sus antepasados, de su madre, abuela, abuelo, bisabuelo, tío-tatarabuelo o de Pedro de Benavente Aranda, primer postero de Carmona en 1764, y asegura que “no era ni es tarea fácil”.
Una vida dedicada a la administración de Lotería Virgen de Gracia
“No olvidaré aquel año de 1985, cuando me puse, por fin, frente a un cristal para vender décimos. Esas ganas, esos ánimos de nuestros clientes, las dudas, el miedo a no hacerlo bien… Tantas y tantas cosas que se viven a diario van forjando, sí o sí, a un administrador de loterías en el tiempo”, confiesa.
Son muchos años tras la administración. Al principio, todo era más sencillo y con tecnología limitada. Sin embargo, los avances en la tecnología, como la digitalización y las redes sociales, han cambiado el panorama completamente. De ser reacio a los cambios tecnológicos, ahora Valentín valora la importancia de las plataformas de juego.
Valentín habla de que, cuando llegó en 1985 a la calle de San Pedro, todo era más fácil, más sencillo de manejar. “Estaba claro que la lotería gustaba en Carmona, pero en cuanto a tecnología, estábamos un poco atrasados. Con los años, claro está, la lotería ha dado un vuelco bestial, apoyada siempre por esa fidelidad del pueblo”.
Recuerda cómo se hacía la venta, cómo era el trasiego con la Primitiva, la Bonoloto y las Quinielas en un terminal enorme, tan lento que daba miedo. También cómo a Carmona le gustaba el tema de las participaciones en Navidad, jugándose muchas veces a medias, y si tocaba algún premio, rezando por el follón que eso conllevaba.
El GORDO cayó en Carmona
De esta trayectoria, se queda con el sorteo del 3 de diciembre de 1988, cuando Carmona celebró el GORDO con el número 40213. “Ese día pasó a la historia de Carmona con letras mayúsculas. Imagínate, 750 millones de las antiguas pesetas en premios”.
Asegura que “fue una locura total en esta bendita ciudad, con una alegría que cambió la cara de nuestros vecinos para muchos años. Con decirte que la calle de San Pedro quedó cortada esa mañana, y que los bares fueron una pura fiesta todo el fin de semana. No he vivido nada igual”.
Valentín se jubila
Valentín se jubila y confiesa que, si volviera a empezar, no cambiaría nada esencial, pero mantendría la cercanía con los clientes como principio fundamental de la administración. A partir de ahora, se enfocará más en el descanso y en ver el negocio con otros ojos, cercanos a la jubilación.
El balance de estos años es muy positivo. Está orgulloso del respeto y cariño que ha recibido de sus clientes y amigos en Carmona, aunque reconoce que a veces su carácter lo ha llevado a situaciones difíciles.
“He recogido cada día el cariño y el respeto de mis clientes, he hecho amigos, he sido confidente… porque he intentado, en la medida de lo posible, ser buena persona, aunque nunca es fácil en esta ciudad. Si me arrepiento, claro está, de algún que otro día malo, dado mi carácter. Aunque espero, también, que Carmona me lo sepa perdonar”. Con satisfacción por todo lo vivido, es consciente de que la vida sigue y hay nuevos caminos por recorrer, como disfrutar de más tiempo libre, hacer ejercicio, leer y seguir con su pasión por la historia de Carmona, especialmente en el archivo municipal.
Carmona y Valentín
Valentín es un enamorado de Carmona; es su hogar, un lugar especial de norte a sur y de este a oeste.
La define como una ciudad con una riqueza histórica y cultural impresionante, que ha crecido mucho, pero que siempre ha mantenido su esencia. Los carmonenses son personas cercanas, muy unidas, pero también con carácter fuerte, lo que hace que haya una relación profunda, pero a veces difícil.
Tras años participando en distintos ámbitos sociales, siendo secretario de la Agrupación Deportiva Carmona durante siete veces seguidas, miembro de la junta de gobierno de la hermandad de Nuestro Padre durante más de 40 años, investigador, articulista, miembro del consejo local del deporte durante 8 años, autor del libro Una historia de fútbol local. La Agrupación Deportiva Carmona, miembro de la junta directiva de la Peña de la Giraldilla, pregonero de la Cabalgata de Reyes Magos y, también, de nuestra Semana Santa, también ha tenido tiempo para saldar una promesa que contrajo con unos buenos clientes hace años.
Esa promesa, que para él ha significado mucho, era intentar dar a conocer los apodos de Carmona por su importancia, que la tiene y mucho, ya que hubo un intento allá por los años ochenta del siglo pasado y quedó en el olvido.
Proyecto de los Apodos de Carmona
Desde hace cuatro años, la curiosidad no lo ha dejado tranquilo, de ahí esas ganas de poder llevar a cabo ese reto. Ha logrado recuperar más de 3.000 apodos, muchos de ellos olvidados, pero importantes para la cultura popular de Carmona.
Siempre fue una curiosidad que lo mantuvo en marcha durante estos años, con la intención de rescatar una parte importante de la historia de Carmona. Todo comenzó buscando apodos, y lo que pretendía era darles visibilidad, hacer que la gente los conociera y apreciara su valor cultural.
Asegura que la investigación ha sido increíble, con un caudal de información que no esperaba y que le ha permitido contactar con muchas personas que compartieron su historia.
3.160 apodos
Ha recopilado un total de 3.160 apodos y algunos de los apodos son muy peculiares como FOLLAPAVA, JUANITO COGEME UN NIO, MARQUÉS LA CANDILETA, y su favorito ZAMAZARRILLA, entre otros.
Recibió muchas sorpresas, como reencuentros de personas que no sabían nada unos de otros desde hace años, lo que le hizo sentir que había logrado algo muy positivo para Carmona.
Lo más emotivo para él ha sido la gratitud de los carmonenses, muchos de ellos agradecidos por haber recuperado una parte de su historia y cultura. Asegura que sería ideal que la lista se guardara en el Museo de la Ciudad, pues es una parte fundamental de la identidad de Carmona.
Un apasionado de Carmona, de su mujer y sus hijos, y gran devoto de la Santísima Virgen de Gracia, y a pocos centímetros, de Nuestro Padre Jesús Nazareno, aunque dice que le quedan pocos sueños por cumplir, asegura que los está buscando.
(Carmona, 2001). Periodista de vocación, siempre ha soñado con vivir de la palabra. Especializado con un máster en TV y contenidos multimedia en la Cámara de Comercio de Sevilla, se define como un enamorado de Carmona y la provincia de Sevilla, su historia y sus costumbres. Su objetivo: seguir aprendiendo y contando historias apasionantes.