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Luis J. Rebolo renuncia al sacerdocio tras 14 años de servicio

Luis J. Rebolo renuncia al sacerdocio tras 14 años de servicio

Pocas veces en la vida una persona cala tan hondo en un pueblo y en tan poco tiempo. El discurrir de la vida obliga constantemente al ser humano a reinventarse y a adaptarse a los cambios y a las sorpresas que nos depara nuestro paso por este mundo.

Hoy damos a conocer la decisión de Luis J. Rebolo, hasta ahora Párroco de Ntra. Sra. de la Asunción, de abandonar el sacerdocio y con ello su tarea en Osuna.

Durante la mañana de hoy lunes el Consejo Episcopal abordará el proceso de secularización en el que Luis J. Rebolo está inmerso y también el nombramiento del nuevo párroco o administrador parroquial de Ntra. Sra. de la Asunción. Una tarea que no debe ser nada fácil pues en los años que ha estado en Osuna, Luis J. Rebolo ha dejado huella y ha marcado la vida de muchos ursaonenses.

Luis Joaquín Rebolo González, nació en Sevilla hace 37 años y se ordenó sacerdote en la propia capital hispalense el 16 de septiembre de 2001. En estos catorce años ha sido diácono y vicario parroquial de Sta. María del Alcor de El Viso del Alcor, párroco de Santiago y Arcipreste de Écija así como rector de la Iglesia de Sta. María y Sta. Bárbara también de la localidad astigitana. En 2011 llegó a Osuna siendo nombrado Vicario Episcopal de la Zona Sur y ejerciendo también la función de párroco de Ntra. Sra. de Consolación y desde Septiembre de 2014 asumió el cargo de párroco de Ntra. Sra. de la Asunción también de nuestro pueblo donde ha puesto fin a su sacerdocio.

Ahora, don Luis -como es conocido cariñosamente por los ursaonenses- toma un nuevo camino en su vida, una difícil decisión que le habrá supuesto mucho tiempo de meditación y valoración de los motivos personales que le han hecho dejar el ministerio presbiteral, aunque por supuesto siempre con la misma Fe y confianza en Dios que todos conocemos.

Osuna ha recibido una gran enseñanza de don Luis, que será difícil de olvidar, no sólo por el ejercicio de su sacerdocio en dos de las tres parroquias de nuestro pueblo, sino también por las conferencias que le hemos escuchado o los artículos que hemos podido leerle en nuestro periódico digital. Estamos frente a una persona culta, Doctor en Teología y con un amplio interés por lo que ocurre en la sociedad y la política como buen ciudadano implicado por el mundo que le rodea.

Don Luis era de esos sacerdotes que quizás más puedan identificarse con la nueva Iglesia que el Papa Francisco nos está demostrando que puede hacerse y de la que estamos seguros que desde su vida secular seguirá compartiendo.

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Vaya desde El Pespunte nuestro más sincero agradecimiento al tiempo y esfuerzo que don Luis ha dedicado en favor de nuestra Osuna y que aunque para todos ha acabado antes de lo que pensábamos, su paso por nuestro pueblo ha quedado escrito con letras mayúsculas no sólo por lo que ha hecho sino también por lo que ha permitido que se pueda llegar a hacer.

Editorial








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