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Una familia residente en la Barriada Andalucía de Osuna ha sido víctima de un robo. El carrito gemelar que utilizaban para sus dos hijos pequeños, uno de 7 meses y otro de 2 años y medio, ha desaparecido en la madrugada del jueves.
El propietario del carrito gemelar ha explicado los hechos en un mensaje: «Nosotros siempre dejamos el carro ahí, llevamos dos años y medio dejándolo en el mismo lugar, justo debajo de las escaleras, sin ningún tipo de candado ni cadena porque, obviamente, quién se va a pensar que va a pasar lo que ha pasado». La familia, que vive en un cuarto piso, ha explicado que subir y bajar el carro gemelar diariamente era inviable debido a su tamaño y peso.
El carro robado es un modelo Bugaboo Donkey 3 gemelar, que, según detalla el afectado, «tenía dos sillitas de paseo, una con funda de color rosa y otra de color azul, para la niña y para el niño». El propietario indicó que dejaron el carro en su lugar habitual la noche anterior al robo y que, al regresar a casa alrededor de las 11 de la noche, aún estaba allí. Sin embargo, cuando su esposa fue a recoger el carro a la mañana siguiente para llevar a su hija pequeña a la guardería, el carrito ya no estaba.
Vecinos del bloque han comentado que el carro ya no estaba a primera hora de la mañana, entre las 5:30 y 6:00, lo que indica que el robo se produjo durante la madrugada. «Algunos vecinos nos han comentado que cuando bajaron para trabajar ya no estaba el carro», señaló el afectado.
La familia ha interpuesto una denuncia ante la Guardia Civil tras percatarse del robo
El dueño del carrito, visiblemente afectado, ha lamentado que «es más el desavío que lo que vale el carro», aunque ha destacado que el valor económico del carrito es también considerable.
El afectado expresó también su sorpresa por el hecho, dado que en la zona todos los vecinos se conocen y llevan buena relación. «Nos llevamos bien con todo el mundo, me extrañaría que fuese alguno de los vecinos», aseguró. Sin embargo, ha apuntado a la posibilidad de que el robo se hubiera producido debido a que alguna de las puertas del bloque se hubiera quedado entreabierta o por un fallo en el porterillo: «Puede que alguien haya entrado por una puerta trasera o principal, o que hayan llamado a algún piso y como el porterillo no funciona muy bien, abriesen sin preguntar quién es».
La familia, que depende de este carrito para el día a día, se encuentra ahora en una situación difícil. «Estamos a la espera de que aparezca el carro, aunque ya nos hacemos a la idea de que no lo vamos a encontrar», explicó el propietario, quien además lamentó que «no nos da la vida para comprar otro carro gemelar, obviamente, con el dinero que valen».
