Padres de alumnos del CEIP Rodríguez Marín de Osuna muestran su impotencia por la falta de recursos

Un grupo de padres y madres del CEIP Rodríguez Marín de Osuna queremos poner de manifiesto nuestra inconformidad e impotencia ante la situación en el que se encuentra nuestro centro en relación a la falta de personal para atender las necesidades más básicas de nuestros hijos.

A fecha de 5 de octubre de presente curso nos encontramos con una situación inadmisible e intolerable para nuestros hijos ya que, siendo el colegio más grande de Andalucía (937 alumnos en infantil y primaria) y probablemente el más grande de España, no cuenta con los recursos humanos necesarios para afrontar este gran problema. Desde la primera semana de curso nos encontramos sin monitora en el aula específica para atender a nuestros pequeños, entre cuyas funciones están la atención en cuanto a deficiencias higiénicas y de alimentación y colaboración para facilitar la integración o socialización con el resto de compañeros.

El curso se inició con una baja laboral indefinida de la educadora titular de la plaza, situación que se ha resuelto hoy mismo. Pero, queremos poner de manifiesto que este recurso, así como el segundo recurso que compartimos con el IES, es muy insuficiente para poder dar cobertura con garantías a todo el alumnado que precisan monitor (10 alumnos en total).

Por otro lado, resulta también llamativo que el centro solo dispone de 3 maestros de PT a tiempo completo y 1 maestra de AL y otra a media jornada que también se comparte con el IES para atender a un total de 80 alumnos que presentan distintas patologías. El volumen de trabajo que tienen estos docentes supera con creces cualquier demanda o necesidad que se requiera por parte de nuestros hijos por lo que consideramos que la atención es incompleta o insuficiente.

Tampoco nos conformamos con solo 3 PT y 1 AL compartido, ya que el volumen del trabajo es muy superior del que deberían para garantizar la asistencia de todo el alumnado. Pedimos vuestro apoyo por que hoy, por suerte o por desgracia, son nuestros hijos, pero mañana pueden ser los vuestros y os tocará esto.

Solo queremos que se cumpla la ley que garantiza que nuestros hijos tengan cubiertas sus necesidades más básicas, que se puedan integrar con normalidad con el resto de compañeros y, sobre todo, que ¡SEAN FELICES!