Martes Santo: Tras la tempestad llegó la Esperanza
Y eso dice el refrán, “Tras la tempestad llegó la calma” pero para nosotros hoy: la Esperanza, esa que no se ha perdido en ningún momento, tras un día poco estable y muy gris. Serían las 7 de la tarde cuando el sol lució, dando un respiro a las nubes que abundaban el cielo de Osuna. Y con él, la ilusión que se ha visto cumplida por los devotos y hermanos de la Hdad. de la Vera-Cruz.
A las 20:30 horas de la tarde, se abrían las puertas del templo de San Agustín, dando paso a la Cruz de guía de la hermandad. Seguida tras ella, aparecían los primeros nazarenos, ataviados con túnicas negras y cinturón de esparto, siendo estos los hermanos y devotos del Santísimo Cristo del Portal, era destacado el número de hermanos que acompañaban este año a esta Imagen. El exorno floral del Cautivo, era de claveles rojos en el monte y las jarras, bajo éstas, sobresalían lirios morados y rosas rojas. Tras el paso, lo acompañaba la Agrupación Musical Cristo de la Misericordia de Lepe, que fue homenajeado por el público en su retirada. El paso del Cautivo estuvo acompañado durante todo su recorrido por fieles devotos que admiran su belleza y el buen andar de sus costaleros, los cuales se superan año tras año para enriquecer más si cabe, el esplendor de este paso. Además también se destaca el acompañamiento de dos jóvenes contraguías en este paso, siendo estos Alejandro Maldonado y Evaristo Bellido.
El Santísimo Cristo de la Vera-Cruz no tardó en dejarse contemplar, pocos minutos después de salir el Cautivo, hizo su salida de la iglesia de San Agustión. Al igual que el Cautivo, los nazarenos de este Cristo iban exactamente igual vestidos, siendo notable el aumento de número de devotos presidiendo al paso. Justo delante del paso acompañaba el Libro de Regla, escoltado por dos varas y precedido por dos incensarios. Un dato curioso, ha sido la saeta que se le ha cantado al Santísimo Cristo, nada más salir, siendo esto poco corriente en esta Hermandad pues es, en puntos concretos, donde se le suele cantar a los Titulares de la Vera-Cruz. El exorno floral que acompañaba al Cristo, se mantiene como viene siendo de costumbre, compuesto por rosas rojas, lirios, calas, cardos y esparragueras. El acompañamiento musical de este paso, es la Banda de Música Bienmesuena de El Saucejo, la cual ha interpretado marchas como “Hosanna in Excelsis”, o “Mater Mea”, entre otras.
Tras el paso del Cristo de la Vera-Cruz, empezaban a aparecer los primeros nazarenos ataviados con hábito y capa color crema y, antifaz, fajín y botonadura en verde. Este primer tramo de nazarenos se corresponde con los más jóvenes de la hermandad, que acompañan a la Virgen de la Esperanza. El palio asomaba lentamente por la iglesia, con toda la candelería encendida, cosa que no duró mucho, pues fue apagada casi todo el recorrido, a pesar de los esfuerzos por mantenerla encendida. Presidía el paso de palio el hermano mayor de la hermandad, José Antonio Barrera Valverde y el párroco y director espiritual de esta misma, Rvdo. P. D. Manuel Sánchez de Heredia. Tras el paso acompañaba la Banda de Alcalá del Valle, la cual ha interpretado un repertorio muy acorde con el estilo de este paso, destacando entre otras, “Aires de Triana”, en la entrada del palio. También es destacable la saeta cantada por el hijo de Manuel Cuevas en el regreso al templo del palio.
El ritmo de la cofradía en general, ha sido el correcto, respetando en todo momento los horarios establecidos, siendo incluso superados, ya que la cruz de guía entró en el templo diez minutos antes de lo previsto, finalizando la penitencia a la 1:50 con la entrada del palio.
Por tanto, podemos calificar una tarde-noche de Martes Santo magnífica, pues debido a los pronósticos meteorológicos que se nos presentaban, hemos disfrutado de una maravillosa estación de penitencia sin incidentes.
Clara Domínguez Rodríguez
Fotos: José Manuel Fernández Herrera