Manifiesto sobre los problemas con el Aula Específica del colegio Rodríguez Marín

Somos Susana Morón y Miguel A. Matas, padres de Pablo Matas Morón, alumno con necesidades especiales de apoyo educativo y escolarizado en el Aula Específica del CEIP Rodríguez Marín de Osuna.

Queremos poner de manifiesto y explicar a través de las redes sociales y los medios de comunicación el problema, que, año tras año, lleva padeciendo nuestro hijo, al igual que el resto de sus compañeros y compañeras del aula especifica, todos necesitados de atenciones especiales.

Para ello vamos a intentar lograr por todos los medios y la fuerza que podamos ejercer a través de la difusión de este escrito, para que este manifiesto llegue a la dirección del centro, a la administración pública y al defensor del pueblo, ya que por los caminos y medios oficiales que llevamos años andando, no nos prestan atención alguna y necesitamos urgentemente poder conseguir la integración plena en el colegio de nuestros niños y niñas, sin perder ni un solo día mas, especialmente por el bien de todos ellos.

Este año, desde la segunda semana de este curso 2019 – 2020, les han retirado a una monitora, la cual se encargaba de atender las necesidades básicas de nuestros hijos. Como consecuencia de esto, las integraciones no se podrán llevar a cabo y, en caso de poder darse, la profesora terapeuta del aula específica no podrá trabajar con los niños y las niñas que queden bajo su cargo, con el agravio y el perjuicio, de nuevo y un año más, de que no se podrán conseguir los objetivos marcados para nuestros hijos, otro curso más.

Además, con este grave problema, de falta de profesionales y de medios en este centro escolar, el CEIP Rodríguez Marín de Osuna, las necesidades de nuestro hijo, al igual que la de otros niños y niñas, son mucho mayores y de gran necesidad, ya que, por ejemplo, se limitan a realizar solo un cambio de pañal durante toda la mañana, pudiéndose llegar nuestro hijo a hacerse sus necesidades encima, cosa habitual en él, ya que es totalmente dependiente al realizar sus necesidades fisiológicas y también en otros aspectos, como la mayoría sabéis. Ahora, si se hace pipí o caca por segunda vez en la mañana, no lo cambian, y tiene que estar mojado o sucio hasta que lleguemos al cole uno de sus padres, para poder cambiar el pañal a nuestro hijo, situación que también les ocurre a otros padres y que padecen los pobres niños.

También nos han recortado recursos de logopeda que es de vital importancia. En el curso anterior contábamos con 4 horas semanales de tratamiento de logopedia, reduciéndose bruscamente y sin previo aviso en este curso, a tan sólo 2 horas a la semana, repercutiendo gravemente en el desarrollo diario de todos los niños.

Llevamos 4 años igual y solo queremos que se conozca esta lamentable situación que nosotros, junto a otros padres, que seguimos constantes en esta lucha diaria, cómo cualquier padre o madre haría por su hijo o hija.

No vamos consentir, ni vamos a perder ni un día más en el desarrollo de nuestros hijos, por mucho que el centro y la administración se nieguen a reconocerlo, porque ya estamos cansados de tantos parches y una excusa tras otra.

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Exigimos de una vez por todas a quienes les correspondan, que nuestros hijos puedan disfrutar de una formación actualizada, con mentalidad integradora y cohesionada, para dar una buena atención psicopedagógica y cultural, adaptada y acogedora para una buena práctica educativa, para que este aula especifica pueda favorecer más en la educación nuestros hijos.

Susana Morón y Miguel A. Matas

 

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