Más de 140 personas se organizan para crear una cooperativa de viviendas en Osuna
El pasado miércoles 18 de diciembre, onomástica de la Esperanza, muchos vecinos de Osuna pusieron la primera piedra de ese sueño, ilusión y necesidad de tener una vivienda propia. El salón de actos de la Casa de la Cultura de Osuna acogió bajo un gran éxito a más de 100 personas interesadas en esta iniciativa que parte de Largui Inmobiliaria y Jesús Sánchez.
La situación de la vivienda en Osuna afronta un desafío crucial debido a la escasez de suelos adecuados para la construcción. Aunque Osuna es una ciudad grande, la falta de terrenos recalificados para la edificación se ha convertido en el principal obstáculo para el desarrollo de nuevos proyectos de viviendas, según afirman desde este colectivo que ahora se ha unido para buscar una solución.
Jesús Sánchez, tuvo la oportunidad de explicar que, “Osuna es una ciudad grande, pero no tiene suelos preparados para la construcción. No hay terrenos recalificados para ello”, señala Jesús. Esta falta de suelos urbanos obliga a esperar largos períodos para conseguir la autorización necesaria, ya que el proceso de recalificación puede tardar hasta cinco años y no siempre se garantiza un resultado positivo.
La Cooperativa: una solución para abaratar los costos
Para abordar esta problemática, se ha propuesto la creación de una cooperativa con el objetivo de hacer frente a los elevados costes de la vivienda. A través de la cooperativa, los interesados podrían conseguir viviendas a un precio más accesible, al eliminar a los promotores que suelen incrementar los precios.
Actualmente, 140 personas se han inscrito en la iniciativa, con la intención de formar parte de este modelo cooperativo que busca abaratar la construcción de nuevas viviendas en Osuna. La propuesta incluye la creación de una junta rectora con la participación activa de los futuros propietarios.
Hoy en día, solo hay un único terreno disponible para iniciar la construcción en un plazo relativamente corto, pues es el único suelo recalificado.
En lugar de grandes viviendas, la propuesta que hay con este terreno es construir 45 viviendas unifamiliares de dos plantas, con cochera, tres dormitorios, dos baños y un patio trasero. Cada parcela tendría alrededor de 110 metros cuadrados de superficie. Este modelo de vivienda responde a la demanda de los vecinos y además permitiría iniciar la construcción en unos ocho meses, siempre una vez formada la cooperativa, según afirma Jesús Sánchez.
Sin embargo, el problema con este suelo es que solo garantiza la construcción de 45 viviendas y, “hay muchos más interesados que viviendas posibles a construir”, se lamentan los ursaonenses.
El futuro de la vivienda en Osuna
El coste de las viviendas es otro de los temas clave en este proyecto. Jesús Sánchez ha señalado que cualquier vivienda que cueste más de 120.000 euros sería inviable para la mayoría de los ciudadanos interesados, lo que refuerza la necesidad de un modelo cooperativo que permita que los precios finales sean lo más ajustados posibles.
Aunque existen terrenos adecuados para la construcción, la falta de suelos recalificados limita enormemente la capacidad de resolver este problema de manera rápida y efectiva. A medida que avanza el tiempo, la presión por encontrar una solución crece. Sin embargo, la falta de terrenos urbanizables sigue siendo el principal obstáculo para resolver este desafío, tal y como destaca Jesús.
Contacto
Jesús Sánchez ha puesto a disposición de todas las personas interesadas en formar parte de esta cooperativa un correo electrónico para que puedan contactar con ellos aunque no hayan podido asistir a esta primera reunión: larguiinmobiliaria@gmail.com