La Virgen de Setefilla regresa a su Santuario tras más de dos años en Lora del Río


Hoy, domingo 26 de enero, la Virgen de Setefilla ha dejado el pueblo de Lora del Río para volver a su Santuario, ubicado en la Sierra a 11 kilómetros del municipio. La Virgen, que llegó al pueblo hace algo más de dos años por la sequía que afectaba a la zona, ha permanecido en Lora del Río durante un periodo extraordinario para interceder ante la calamidad.
En enero de 2024, la imagen de la Virgen ha sido llevada en rogativas debido a la gravedad de la situación. Desde entonces, las lluvias han llegado, y con ello se ha resuelto el problema de la falta de agua. Según las Reglas de la Hermandad, la Virgen debe regresar a su Santuario una vez cumplida su misión, salvo que el pueblo solicite nuevamente su intercesión por otra calamidad o sequía.
Decisión en Cabildo y preparativos para el retorno
El regreso de la Virgen ha sido decidido en un cabildo de hermanos celebrado tras las lluvias que dieron fin a la sequía. Inicialmente, se había establecido el 12 de octubre como fecha de retorno, pero las condiciones meteorológicas han obligado a aplazarlo hasta hoy, 26 de enero.
Durante los días previos, los vecinos de Lora del Río han acudido en turnos organizados a la Iglesia, donde han tenido la oportunidad de despedirse de su patrona. Entre rezos y muestras de devoción, los fieles han expresado su agradecimiento y emoción por la vuelta de la Virgen a su Santuario, donde permanecerá cinco años, salvo una nueva necesidad.
Un Santuario con gran significado espiritual y cultural
El Santuario de la Virgen de Setefilla de Lora del Río se encuentra enclavado en un entorno natural de gran belleza, próximo al recinto amurallado de antiguos núcleos de población hoy desaparecidos. Este lugar no solo es un centro de fe para los habitantes de Lora del Río, sino que también atrae a numerosos peregrinos y excursionistas de toda España.
A diario, devotos visitan el Santuario para rendir homenaje a la Virgen, cuya presencia sigue siendo un símbolo de esperanza y consuelo. Con su regreso, se ha renovado el compromiso de la Hermandad y los fieles con sus tradiciones, consolidando el vínculo entre el pueblo y su patrona.