La Guardia Civil desarticula una caza furtiva de tórtolas en un coto de Écija
En el marco de un operativo de la Guardia Civil contra la caza furtiva, agentes del Seprona frustraron una actividad cinegética ilegal en un coto de caza en Écija (Sevilla). Durante la intervención, se incautaron 75 tórtolas europeas muertas, especie cuya caza está prohibida en la temporada 2024-2025. Además, los agentes han puesto en conocimiento de la autoridad los hechos a través de una infracción administrativa.
Los hechos ocurrieron a finales del mes de agosto, cuando la Patrulla del Seprona de Écija localizó a un grupo de cazadores en las inmediaciones del arroyo de La Moranilla. Al percatarse de la presencia de los agentes, dos de ellos huyeron, dejando 30 tórtolas, un puesto portátil de caza y un catre.
Los agentes lograron identificar a tres personas, dos de las cuales estaban escondidas en el cauce del arroyo, incautando además 45 tórtolas que uno de los detenidos llevaba en su zurrón. Durante la inspección, se descubrió que algunos cazadores que lograron escapar lo hicieron en dos vehículos, dejando a tres ocupantes escondidos en el cauce del arroyo de Reinilla.
En el vehículo que quedó en el lugar, los agentes encontraron dos escopetas de caza, mientras que en la orilla opuesta se halló un segundo morral con 30 tórtolas, una escopeta, dos bancos de caza plegables, un puesto fijo de lona y un collar de perro.
Uno de los cazadores admitió haber cazado 45 tórtolas, aunque señaló que las otras 30 fueron abatidas por quienes escaparon. También reconoció la propiedad de una de las escopetas, afirmando haberla prestado a otro cazador prófugo.
Tras la intervención, la Guardia Civil decomisó las tórtolas abatidas, los cuales fueron remitidos al Centro de Recuperación de Especies Amenazadas (CREA), como alimento para animales en periodo de recuperación.
La huida del resto de cazadores ha generado una investigación con el objetivo de localizar a los otros dos individuos implicados en la caza furtiva.
Colaboradora de redacción.
