JOSE DIAZ SARRIA “CHATO DE OSUNA”

Autores del libro: Juan A. Aguilar y Manuel Zamora. Iniciamos hoy una serie de artículos para que se conozca mejor a un genio del compás con una vida artística llena de anécdotas . Este es un libro que ha sido financiado por la Agencia Andaluza para el Desarrollo de Flamenco. SUS ORIGENES José Díaz Sarria nace en el año 1930 en el pueblo de  Osuna, que pertenece a la provincia de Sevilla, en la actual calle Granada, en el número 22. Su padre se llamaba Manuel Díaz Moya, de oficio albañil y su madre, Carmen Sarria Respeto, que se dedicaba a las labores de casa y al cuidado de sus hijos. SUS PRIMEROS PASOS EN EL MUNDO DEL ARTE El Chato de Osuna comienza su andadura en el mundo del arte en las casas de trato del pueblo. Tendría unos 13 o 14 años. Allí acudía en compañía de El Titi, que era un guitarrista de Marchena pero afincado en Osuna y que era primo hermano del famoso maestro de la guitarra Melchor de Marchena, el padre de Enrique de Melchor. Estas casas de prostitución estuvieron situadas, en un principio, en los barrios periféricos del pueblo y era algo muy extendido y había muchas prostitutas trabajando en esos lupanares. Con el tiempo, ya se establecen en calles y plazas céntricas con el consiguiente problema de que niños y niñas vean cosas impropias de su edad. Esto trajo consigo muchas protestas de sus vecinos. Allí se consumían muchas bebidas alcohólicas y, a veces, se producían peleas y altercados dentro de ellas y tenía que intervenir las fuerzas del orden para apaciguar a los que estaban alborotando. Refiriendo a todo esto nos cuenta El Chato: “ En los años 40 nos juntábamos en un bar de La Carrera que se llamaba “ casa Joaquín” el Titi, el Rubio, el Bobi ( que hacía muy bien los cantes del Niño de la Calzá) , Enrique el bailaor, Jarillo, Manuel Torres Sánchez “ el Canina”, que reside en Granada desde hace muchísimos años y es un cantaor al que no le ha gustado salir de Granada y que por eso es poco conocido por los aficionados e incluso los aficionados jóvenes de Osuna tampoco saben quien es , Francisco Miralles González “ Paquillo el de la Lobita” , Manuel Torres Torres “ el Pitusa” o Chiquito Osuna, como a su también se le conoce en Osuna y fuera de nuestro pueblo y yo y al oscurecer cada uno buscaba su guitarrista y nos íbamos a cantar o a bailar a las casas de trato.  Había que buscar la vida porque había mucha hambre y mucha miseria por aquellos años.” Hay que señalar que quienes enseñan a El Chato a cantar y a hacer compás son dos gitanos canasteros que se llamaban la Fina y el Manolo, los “ paragüé” , que este conoce en la feria de Sevilla  siendo muy joven y se va con ellos a hacer ferias durante dos años. Entre las ferias donde estuvo con estos gitanos podemos nombrar la feria de Jerez, donde, por cierto, conoce a Fernando Terremoto, que por aquellos tiempos era bailaor. Otras ferias que hizo fueron las de Córdoba, Paradas, y la ya mencionada de Sevilla. En Los años 40 había mucha afición al cante en Osuna. Se organizaban espectáculos en la plaza de toros y allí acudían los artistas punteros del momento con su “trupe”. En el coso centenario de esta villa ducal han actuado entre otros Pastora Pavón “ la Niña de los Peines”, su marido Pepe Pinto, José Cepero, la Niña de Antequera, Antonio el Sevillano o los guitarristas Niño Ricardo o Melchor de Marchena. También se hacían espectáculos en el Teatro Alvarez Quintero, en el cine Carretería, que era un cine de verano, en el cine de Capado y en un cine portátil que ponían en el Ejido. En la Alameda del Bacalao, que es una plaza que está enfrente de la iglesia de Santo Domingo, había un quiosco regentado por un tal señor López, que se dedicaba a organizar espectáculos flamencos . Otro señor que organizaba también  espectáculos de este tipo era D. Diego Hidalgo, que trabajaba en el Ayuntamiento y que tenía un teatro ambulante y lo llevaba por todos los pueblos y en dicho teatro trabajó el Chato en más de una ocasión. Una vez lo contrataron en la feria de Osuna en el teatro chino Manolita Chen, junto al bailaor Enrique Osuna. Con respecto a estas primeras actuaciones el Chato nos cuenta: “ Un día fuimos a actuar a La lantejuela y en nuestro espectáculo iba uno que hacía de faquir, de esos que meten la aguja y no hacen sangre. En aquella ocasión dicho faquir llamó a un hombre del público traspasándole la piel del cuello. Empezó a sangrar y al llegar el alcalde con el cabo de puesto tuvimos todos los componentes del espectáculo que barrer el pueblo.” 25 Chato de Osuna cantándole a Carmen Amaya

View Comments (0)

Leave a Reply

Your email address will not be published.

© 2023 COPYRIGHT EL PESPUNTE. ISSN: 2174-6931
El Pespunte Media S.L. - B56740004
Avda. de la Constitución, 15, 1ª planta, Of. 1
41640 Osuna (Sevilla)