Indicios de amaño en el móvil de Kike Salas
- La policía ha descubierto mensajes en los que el jugador pactaba tarjetas amarillas con su entorno cercano
Las malas noticias en el Sevilla FC no paran de sonar. El jugador, Kike Salas, está siendo investigado por la Policía Nacional. Lo hacen por su posible implicación en un caso de amaño relacionado con apuestas deportivas. Según ha publicado ‘El Confidencial’, en el móvil del defensa encontraron mensajes de WhatsApp que lo vinculan directamente con una red que apostaba usando información privilegiada sobre tarjetas amarillas en partidos oficiales.
Mensajes comprometedores y apuestas coordinadas
La investigación comenzó a principios de este año y apunta a que Kike Salas habría participado en al menos cinco partidos en los que presuntamente forzó amonestaciones para beneficiar a su entorno. En esos encuentros, se cree que el jugador facilitó datos para que conocidos apostaran a que recibiría una tarjeta amarilla, obteniendo beneficios económicos.
Uno de los partidos clave fue el disputado entre Las Palmas y Sevilla el 14 de abril de 2024, donde Kike Salas fue amonestado. Varios amigos del jugador realizaron apuestas en distintas casas, convencidos de que el defensa recibiría una tarjeta amarilla. Las ganancias se consiguieron en apenas minutos tras la amonestación.
Los mensajes descubiertos por la policía y publicados por El Confidencial, revelan una clara coordinación entre Salas y sus contactos. En uno de los chats, el jugador le dice a un conocido: “Tendrás 500 en la cuenta. Son 300 míos y tuyos 200. Le metió 50 a Isco”. Este texto sugiere la distribución de ganancias y cómo se organizaban para sacar provecho económico de la situación.
Además de Kike Salas, la policía investiga a una decena de personas vinculadas al jugador. Algunas de ellas habrían usado identidades falsas o cuentas de terceros para hacer las apuestas sin levantar sospechas. Esta práctica dificulta la detección y permite evitar sanciones.
Detención y postura del Sevilla FC
El 14 de enero, la policía detuvo a Kike Salas en la ciudad deportiva del Sevilla FC. Tras la detención, lo trasladaron a un juzgado en Morón de la Frontera, su localidad natal. Durante la instrucción del caso, el jugador se acogió a su derecho a no declarar y quedó en libertad con cargos, mientras sigue la investigación.
El Sevilla FC emitió, por aquel entonces, un comunicado oficial en el que muestra respeto por el proceso judicial y pide cautela ante las informaciones publicadas. El club recordó en aquella ocasión la importancia de la presunción de inocencia. También aseguraron que seguirían el caso con atención y de cerca.
Por último, el club reafirmó su compromiso con la integridad del deporte. Señalando que lucharían contra cualquier conducta que pudiera dañar la imagen del Sevilla FC o la competición, manteniendo la transparencia y el juego limpio como valores fundamentales.
Redacción de El Pespunte
