El Señor de la Salud luce ahora una túnica morada de lana fina, confeccionada por Pepe Cerezal en 2011. Más allá de su sencillez, transmite toda la fuerza de la fe popular de Sevilla.
La Virgen de las Angustias, una joya coronada de detalles
La Virgen estrena un conjunto lleno de simbolismo, historia y cariño donado por sus devotos. Lleva una saya verde agua confeccionada en 1960 a partir de un traje de luces del torero José Ordóñez, y un fajín celeste brocado del siglo XIX, donado en 2012. El manto, en raso celeste con bordados de torero, fue creado con motivo de su Coronación Canónica en 1988.
La espectacular toca de sobremanto, bordada en oro sobre malla por Carrasquilla en 1991, fue donada por la Duquesa de Alba. El tocado de tul de seda plisado fue regalo de Isabel Leo, y los puños, una novedad de 2024, fueron elaborados con encaje del siglo XIX por el equipo de Priostía.
Un pañuelo con alma y muchos símbolos
Otro de los grandes estrenos es un pañuelo antiguo de encaje Honinton, donado por Juan Carlos Vázquez Alejo. Además, la Virgen porta un rosario de marfil y plata del siglo XX, una medalla de San Benito Abad donada por Enrique Rasco, corales de Lalo Tejada, el broche de la Patrona de los Donantes de Órganos, y la medalla de los Desamparados. En la cintura, luce también la medalla en oro de la Patrona de Sevilla, Nuestra Señora de los Reyes, que celebrará sus cultos en agosto.

Una libélula que habla de belleza, arte y fe
Como joya destacada, la Virgen estrena una libélula antigua estilo Art Nouveau, donada por Francisco Conde. Esta pieza británica del principios del siglo XX está realizada en plata y contiene un cristal que protege un ala real de mariposa, una técnica típica de la época victoriana. Su efecto irisado y tornasolado simboliza la belleza natural y espiritual que envuelve a María.

Un broche con sabor a hermandad
En el centro del tocado, lleva un broche con el escudo de la Hermandad de la Redención, regalo que recibió en 2022 cuando esta corporación salió desde el Santuario de los Gitanos. Un gesto que refleja la hermandad entre corporaciones y la alegría de compartir estos días de homenaje mariano.
Fe, arte y cariño en cada puntada
Con este nuevo atuendo, la Hermandad de Los Gitanos no solo renueva la imagen de sus Titulares, sino que lanza un mensaje cargado de arte, fe y comunidad. Cada pieza es una historia, cada bordado una oración. Y Sevilla, como siempre, lo celebra con emoción.