Fases de una construcción exitosa

En el momento que una empresa decide poner en marcha una construcción de envergadura, es esencial tener muy claro cuáles son los pasos que hay que dar para que la obra se complete de la mejor manera posible. Para que así se pueda dar un servicio integral en todo momento y, sobre todo, que la edificación final tenga la mayor seguridad para poder ser usada sin ningún tipo de problema.
Como es evidente, para poder llevar a cabo cualquier tipo de obra es muy importante marcar bien los tiempos de la misma. Además, es importante saber a la perfección los tipos de profesionales que se necesitan y controlar todos los pasos que hay que dar para que no haya ningún tipo de problema, antes, durante y una vez que esté finalizada la obra.
Como no podía ser de otra manera, el paso previo a la construcción siempre es realizar los estudios correspondientes, así como un anteproyecto y el proyecto técnico. Para contar con todas las garantías al respecto en este sentido, es esencial acudir a una empresa especializada en ingenieria de proyectos que cuente con los profesionales adecuados para llevar a cabo esta actividad y ofrezcan las mejores garantías. Además de todo esto, habrá que tener muy en cuenta las técnicas de gestión y coordinación o las auditorías.
Una vez que se ha contemplado todo esto, es el momento de poner en marcha la obra y para ello, hay que pasar por distintas fases en la construcción que son esenciales, ¿cuáles hay que destacar?
Cerrar el área de espacio público
A la hora de iniciar una construcción, uno de los primeros pasos que hay que dar es aislar por completo la zona, ya que es esencial ofrecer protección al público en general, especialmente si la obra se va a hacer en una zona de tránsito habitual. Generalmente, esto se cierra con vallas y casetas de obra y oficinas, todo ello suministrados con los servicios necesarios como conexión a internet, electricidad o un área de aseo.
La cimentación
Cualquier construcción que se precie requiere previamente de una buena limpieza del terreno así como su nivelación, para poder instalar posteriormente una buena cimentación que sea sólida para aguantar sin problema el peso que se requiera en cada una de las fases del proceso. Para poder cimentar adecuadamente hay que calcularlo todo muy bien y tener bastante precisión cuando se ejecute. Además de todo esto, hay que decir que los movimientos de tierra hay que hacerlos con un estudio ambiental.
La estructura
Evidentemente, cualquier construcción debe tener una estructura previa de esta forma, dependiendo del tipo de obra que se vaya a hacer, así habrá que colocar uno u otro elemento. En el caso de los edificios, es habitual el uso del armazón de hormigón pretensado.
Instalaciones
En una construcción, se entiende por instalaciones a todos aquellos elementos auxiliares que no forman parte de ese esqueleto o estructura previa, no obstante, para que sean útiles, necesitan de la infraestructura mayor. Aquí se enmarcarían elementos tales como los conductos de ventilación, tubos para la fibra óptica o desagües…
Impermeabilización y aislamiento
Otra de las fases importantes dentro de una construcción es añadir elementos de impermeabilización y aislamiento a la obra, con el objetivo de garantizar la durabilidad de la misma. A lo largo de los años, factores externos y naturales como las temperaturas, el agua o el viento pueden jugar malas pasadas si, en esta fase de la construcción, no se han incluido los elementos necesarios para que la obra esté en perfectas condiciones.
Acabados y cierres
Finalmente, en esta lista habría que añadir como ítems constructivos los acabados y cierres de la construcción que se ha llevado a cabo, teniendo en cuenta que ambas cosas tienen un gran peso visual, que también pueden llegar a resultar bastante funcionales. En este caso hay que hablar de todo lo que tiene que ver con los trabajos de carpintería, cerrajería o cristalería, entre otros.