Fallece el sacerdote Antonio Gálvez López, hijo predilecto de Castilblanco de los Arroyos
Antonio Gálvez López, sacerdote reconocido por su extensa trayectoria pastoral en la Archidiócesis de Sevilla, falleció ayer miércoles 25 de diciembre a los 89 años. Nacido en Castilblanco de los Arroyos en 1935, Gálvez fue ordenado sacerdote el 21 de mayo de 1959, dedicando más de cinco décadas al servicio eclesiástico en distintas parroquias de Sevilla y su provincia.
A lo largo de su vida pastoral, ha desempeñado su labor en la Parroquia Santa María de la Asunción, de Alcalá del Río; en Nuestra Señora de Consolación, del Pedroso; en Nuestra Señora de los Dolores, de Sevilla; y finalmente en la Parroquia Nuestra Señora de la Salud, también en Sevilla. En esta última estuvo al frente durante más de 35 años hasta su jubilación. Además, el sacerdote ha compaginado su labor parroquial con la docencia, siendo profesor de Religión durante una década.
Antonio Gálvez también ha recibido numerosos reconocimientos en vida, destacándose el nombramiento como Hijo Predilecto de su localidad natal, Castilblanco de los Arroyos, en febrero de 2019. Este homenaje, aprobado por unanimidad en el pleno del Ayuntamiento, fue entregado el Día de Andalucía, en un acto celebrado en el teatro municipal Miguel Fisac. Durante la ceremonia, el sacerdote expresó su sorpresa y gratitud por el reconocimiento, subrayando su vocación temprana y su compromiso con el “servicio y la disponibilidad” que marcaron su ministerio pastoral.
El sacerdote, que continuó activo tras su jubilación ofreciendo apoyo y servicio al presbiterio diocesano, será recordado como una figura cercana. La Archidiócesis de Sevilla ha manifestado su agradecimiento por la vida y obra de Antonio Gálvez López, al tiempo que ha pedido oraciones para su descanso eterno.
Redacción de El Pespunte.