Estos son los 5 nombres de mujer más comunes en Lora del Río
Lora del Río, municipio de la provincia de Sevilla, sigue mostrando una preferencia clara hacia los nombres tradicionales y profundamente enraizados en la historia local, al igual que sucede con los apellidos en el municipio. A continuación, un ranking con cinco nombres de mujer más comunes en esta localidad, según los últimos datos disponibles:
1. María Carmen (36,50‰)
El nombre más común en Lora del Río es María Carmen, una combinación muy extendida en toda España que une la figura de la Virgen María con el culto a Nuestra Señora del Carmen. Es un nombre que denota devoción, tradición familiar y una fuerte identidad cultural, profundamente arraigada en el ámbito andaluz.
2. Setefilla (31,34‰), en honor a la patrona de Lora del Río
Setefilla es, sin duda, un nombre único y profundamente loreño. Hace honor a la Virgen de Setefilla, patrona de Lora del Río, cuya devoción se remonta a siglos atrás y se mantiene viva con fervor en la localidad. Llamarse Setefilla es llevar consigo una parte esencial de la identidad emocional del pueblo.
3. Carmen (31,34‰)
Carmen es un nombre tradicional que conserva una fuerte presencia en la cultura andaluza. Asociado a la Virgen del Carmen, protectora de marineros y muy venerada en toda España, su popularidad en Lora del Río es reflejo del arraigo de las costumbres religiosas y del aprecio por los nombres clásicos y con historia.
4. María (30,79‰)
María, en su sencillez y pureza, es uno de los nombres más universales y atemporales. En Lora del Río, es también un homenaje recurrente a la Virgen, en cualquiera de sus advocaciones. Su omnipresencia en el nomenclátor local demuestra cómo la tradición cristiana sigue siendo parte central del tejido social.
5. Dolores (26,94‰)
Dolores, nombre que remite a la advocación de la Virgen de los Dolores, representa el consuelo en el sufrimiento y la esperanza en tiempos difíciles. Es un nombre cargado de emoción, profundamente mariano, y muy presente en la memoria colectiva de Andalucía y, por supuesto, de Lora del Río.
