España es campeona mundial de pádel femenino, mientras que el equipo masculino cae ante Argentina
Las chicas se coronaron primero
En el primer enfrentamiento, Gemma Triay y la joven Claudia Fernández unieron experiencia y energía para superar con autoridad a Virginia Riera y Julieta Bidahorria, logrando un marcador de 6-3 y 6-2. A pesar de que las argentinas comenzaron con ventaja, las españolas ajustaron su juego después de una breve pausa y no cedieron ningún juego más tras el 1-3 inicial. La contundencia de Triay, combinada con los recursos de Fernández, fueron clave para asegurar el primer punto de la serie.
En el segundo y decisivo encuentro, Ari Sánchez y Paula Josemaría, la pareja número uno de España, se encontraron con una ardua batalla ante Delfina Brea y Claudia Jensen. Aunque las argentinas iniciaron con un nivel arrollador que les permitió llevarse el primer set por 3-6, Sánchez y Josemaría lograron recuperar el control en el segundo set, ganándolo por 7-5. En el set final, las argentinas llegaron a estar en ventaja y sacaron para cerrar, pero la fortaleza mental de las españolas les permitieron recuperar el saque y remontar con un 7-5 definitivo.
Un título que representa mucho más que una victoria para las jugadoras de la selección española de pádel. Este es el resultado de años de esfuerzo, dedicación y cohesión como equipo. Enfrentarse y superar a rivales de primer nivel como Argentina en una final de alta exigencia demuestra el altísimo nivel y la madurez del pádel femenino español. Y es que este logro no solo consagra a España como una potencia mundial en este deporte, sino que también inspira a una nueva generación de jóvenes jugadoras, quienes ven en Ari Sánchez, Paula Josemaría, Claudia Fernández, Gemma Triay, Bea González, Marta Ortega, Jessica Castelló, Alejandra Salazar e Iciar Montes, la seleccionadora, un ejemplo de perseverancia, trabajo y pasión por el pádel.
Coello-Nieto arrasan y Galán-Lebron sucumben
Arturo Coello y Coki Nieto se encargaron de asegurar el primer punto para España en la final masculina con una actuación impecable. Desde el inicio, la pareja española dominó a los argentinos Franco Stupaczuk y Martín Di Nenno, llevándose el primer set por 6-1 y el segundo por 6-2. Su contundente presencia en la red y el poderío de Coello desbordaron a sus rivales, marcando un ritmo de juego que estos no lograron contrarrestar.
A lo largo del partido, quedó claro que España impondría sus condiciones. Los argentinos intentaron dirigir sus tiros a Coki Nieto, pero el madrileño respondió con solidez, mientras que Coello, con su imponente alcance, mantenía a los oponentes acorralados. Los ‘superpibes’, que volvieron a jugar juntos en este torneo, esta vez no lograron desestabilizar a los españoles ni generar una sola oportunidad de break. Con una actuación de sobresaliente y muy pocos errores, Coello y Nieto demostraron una gran superioridad, dejando a sus rivales sin opciones en una final que España controló de principio a fin.
Por otra parte, Alejandro Galán y Juan Lebrón fueron los encargados de poner el punto y final al torneo. No obstante, cabe recalcar que la noticia del regreso de la pareja ha sacudido el mundo del pádel, tras los continuos rifirrafes que han tenido ambos jugadores desde su separación. Y en lo que atañe al deporte, tuvieron que sufrir los ex número 1.
Los españoles se enfrentaban a una pareja durísima, Agustín Tapia y Federico Chingotto, números 1 y 2, respectivamente. El partido fue de altos vuelos desde la primera bola hasta la última, siendo prueba de ello la llegada al tie-break en la primera manga. Dicho juego arrancó bien para España, que tuvo dos bolas de set incluso, aunque los argentinos, a base de corazón y coraje, remontaron para llevarse el primer set por 6-7. Sí hicieron los deberes en el segundo set, imponiéndose de una forma muy correcta. Los españoles pronto encontraron el break, para después terminar de cerrar la manga con total seguridad, por 6-3. Sin embargo, la falta de entendimiento entre ambos fue el detalle definitorio del tercer set. Entre fallos no forzados, indecisiones e imprecisiones, los argentinos se impusieron por 2-6 a los españoles, llevando la final al tercer y último encuentro.
Paquito Navarro y Mike Yanguas no pudieron con los inspirados Tino Libaak y Leo Augsburguer
Desgraciadamente para España, el combinado no pudo terminar de cerrar el mundial. Los encargados de ese tercer partido eran Paquito Navarro y Mike Yanguas, que se enfrentaban a Tino Libaak y Leo Augsburguer. Aunque ganaron el primer set sin demasiados sobresaltos por 6-3, no pudieron hacer frente a las posteriores acometidas de los argentinos.
Tino y Leo se crecieron hasta el punto de empezar a dominar sobre la pista. Cada globo acababa en un winner incontestable. Cada mal resto de los españoles resultaba en una presión altísima de los argentinos en la red. Y cada momento de presión, a pesar de que los españoles son más veteranos, fueron bien manejados por los albicelestes. 5-7 se llevaron el segundo set, rompiendo el último saque de Paquito Navarro, para después, proceder a un acto de absoluta valentía de Libaak. A punto de llegar al tie-break en esa tercera manga, Leo Augsburguer sufrió un fuerte calambre que pareció dejarle casi fuera del partido. Momento el que su compañero sacó las garras para coger el peso de todo un país.
Finalmente, Tino Libaak impuso su ley sobre unos erráticos Yanguas y Navarro, que ni siquiera fueron capaces de responder a los argentinos. Merecido resultado y campeonato para Argentina, que se lleva un nuevo mundial a sus vitrinas, tras la victoria en ese último tie-break.
Alegría para el combinado femenino y decepción masculina
Todo resulta en un trofeo para cada bando. El equipo masculino se queda a las puertas de un nuevo mundial, mientras que la plantilla femenina suma otra competición de este calibre, haciendo gala del tremendo potencial de las chicas españolas en el mundo del pádel. Por lo tanto, sensación agridulce en cierto modo, pero felicidad y orgullo para ellas, que acaban siendo las protagonistas.
Periodista deportivo y creador de contenido en redes sociales. Mi objetivo es hacer del deporte algo accesible y divertido para todos. Porque aquí el tiempo extra siempre es emocionante.