Entre bastidoresGran éxito del grupo de teatro Al-Alba
El pasado viernes 7 de Agosto, alrededor de 700 ursaonenses pudieron disfrutar de un nuevo espectáculo del “Grupo de Teatro Al-Alba” de Osuna en un corral de la Casa de Cultura totalmente abarrotado como nunca se había visto en al historia de este grupo. En esta ocasión, los espectadores pudieron ver un homenaje al 70 aniversario de la muerte de Antonio Machado, acompañado de numerosos poetas de la “Generación del 27” y de otras corrientes poéticas, además de tres entremeses de unos grandes clásicos del humor andaluz del s.XX como son los hermanos Álvarez Quintero.
Como miembro antiguo del grupo Al-Alba me gustaría hacer hincapié en esta crónica no en lo que vio el público, (al fin y al cabo mis pobres palabras no podrían describir tal espectáculo) sino en lo que no vio. Aquello que sucedía detrás del escenario, entre bastidores, que al fin y al cabo es lo que siempre como espectador tenemos en nuestro imaginario.
–Pepelu… ¿se me notan mucho las arrugas que me he pintado? es que no quiero que parezcan churretones-, me decía Ángela maquillándose frente al espejo.
–Yo hace mucho tiempo que no hago esto, pero en cuanto subo al escenario se me quitan los nervios-, me dijo Francis.
–Niño, tú avísame cuando empezamos a tocar, que si no la liamos, jeje-, me decía preocupado Joselu, preparándose para esa clase maestra de flamenco que nos dio.
–Mira las pintas que llevo de viejo, le dije a Enrique-, y me contestó: –¿pero tú me has visto a mi con tantos gorros lo que parezco?-, me dijo mientras se vestía de Caliche.
–A ver si puedo cantar bien con esta faringitis-, se lamentaba Ángel, gran cantaor merecedor de su apodo “el Camarón”.
–Tú cógeme de la mano y di lo del “río Guadalquivir”-, le decía Estrella a la preciosa Julia, hija pequeña de Inma, vestida de flamenca.
Por otro lado veía a esas guapísimas bailaoras, peinándose con esas ondulaciones y esos recogidos tan andaluces, repasando movimientos de última hora, dejándose llevar por la leve música que entraba a los camerinos. Y la banda de la Hermandad de la Vera-Cruz, de un pasillo para otro, viendo el espectáculo desde la parte trasera.
–Niño, ¿cuando os vestís?-, le pregunto nervioso a alguno de la banda.
-Cuando la Tania se ponga a planchá, tovía queda tiempo.
La representación continuaba, y se sentía la tensión del momento. Sabíamos que había mucha gente en el corral, sólo unos pocos se atrevieron a mirar entre las cortinas para ver al público. Pero conviviendo con el nerviosismo, también estaba la colaboración, el apoyo y la simpatía entre todos los componentes, como una especie de magia que hacia que todos fuéramos uno.
Todo eso que crea Estrella, año tras año se hace realidad de nuevo. Todo eso que hace Estrella por los jóvenes del pueblo, se hace realidad de nuevo. Todo eso que regala al pueblo de Osuna, se hace realidad de nuevo. Sólo por verla secarse las lágrimas detrás del escenario justo cuando acaba de recitar “La petenera gitana” o “La muerte pequeña de Andalucía”, vale la pena creer en la pasión y en el Arte.
Y creer que ojalá algún día recibamos vuestros aplausos montados sobre el escenario del Teatro Álvarez Quintero.
De parte de Estrella Benavides expresar su emoción y agradecimiento a todos y cada uno de los componentes que han trabajado duro y hecho realidad un año más que el grupo de Teatro Al-Alba, siga amaneciendo cada año con más y más fuerza.
José Luis Ruiz
Fotos: Francisco Aguilar
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Fundado el 24 de noviembre de 2006 en Osuna (Sevilla).
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