Buenas noches Carlos y amigos de El Cuartelillo:
A tan solo 60 horas para que dé comienzo nuestra Semana Santa, os mando mi última reflexión antes de que las puertas de San Agustín se abran para que dé comienzo nuestra Semana de Pasión.
Amigos de El Cuartelillo, esta noche me quiero tomar la libertad para dirigirme a ustedes, los culpables que esta bendita locura llamada El Cuartelillo sea una realidad y seguro que lo hago en nombre de todos los radioyentes de este programa, de nuestro programa.
Quiero dirigirme en primer lugar a un joven loco que hace unos años soñaba con producir y dirigir su propio programa cofrade en la radio. Os hablo de nuestro director don Manuel Fernández, que con tan solo una ilusión hizo de ella lo que hoy llamamos “El Cuartelillo” un programa que traspasa fronteras, haciendo llegar a todos los ursaonenses y no ursaonenses los preámbulos de nuestra Semana Santa. Gracias Manuel, por hacer llegar este programa al corazón de quienes por motivos laborales o de estudios no podemos vivir estos jueves de Cuartelillos Cofrades junto a nuestros amigos.
Pero todos sabemos que un programa de radio no sería un programa sin su presentador y sin sus colaboradores, amigo Carlos, compañero en este bendito mundo de locos, fue la que está sentada en la Victoria la que un día nos unió y seguirá siendo Ella la que mantenga esta amistad siempre unida con el paso de los años, porque estoy seguro que la tarde del Viernes Santo, ya sea como costalero, como penitente o como hermano de la hermandad nos veremos junto al paso de nuestra Virgen de las Angustias, amigo Carlos, a ti también te quiero dar las gracias por compartir tu ilusión, tus ideas y tus proyectos conmigo, por confiar en mí en estas reflexiones que cada jueves me acercan hasta Osuna, mi tierra de la que tuve que emigrar por motivos laborales, y hoy es el momento de agradecerte ese cariño que me tienes después de todo lo vivido. Te animo a que sigas luchando por lo que crees, a que sigas con tus proyectos y te estaré siempre esperando todos los jueves de Cuartelillo para escuchar la famosa frase de SALUDOS Y MUY BUENAS NOCHES A TODOS LOS OYENTES DEL CUARTELILLO.
Queridos amigos de El Cuartelillo, todo esto es posible gracias al equipo humano que cada jueves os sentáis en esa mesa redonda y ponéis vuestro corazón encima de ella y nos habláis desde lo más profundo de vuestros sentimientos. Gracias a cada uno de ustedes por hacernos una Cuaresma más divertida, más cercana y más nuestra.
Y para terminar, no puedo dejar de nombrar al gran hombre invisible, que altruistamente, apasionadamente y siempre con una sonrisa en la boca hace que todos los programas sean una realidad, a él no le gusta que se le nombre, ni aparece en las fotos semanales que tanto nos gusta retuitear, el es el Gran Malabaristas de los cables y los botones Don Ezequiel Rosado, gracias amigo Ezequiel por demostrarnos que no hace falta alardear de cofrade y de cristiano para serlo.
Y con esto, queridos amigos de El Cuartelillo, me pongo en pie y me despido con el más sincero de mis abrazos a cada uno de los que os habéis sentado en esa mesa que tantas cosas buenas nos trae a la memoria.
Que suene el Himno Nacional, que se abran las puertas de San Agustin y que el Niño Perdido salga a sus calles a jugar, Señoras y Señores Cofrades, esto esta aquí ya. Hasta pronto.