El Sevilla Femenino no pasa del empate frente al Espanyol


El Sevilla Femenino visitó la Ciutat Esportiva Dani Jarque para medirse al Espanyol en la jornada 16 de la Liga F. Las hispalenses llegaban con la moral alta tras la victoria en el derbi, con una oportunidad de oro para acercarse a los puestos altos de la clasificación.
El Sevilla alineó a Esther Sullastres en la portería. En defensa estuvieron Lucía Corrales, Eva Llamas, Diana Gomes y Débora García. En el centro del campo, Pamela González e Iris Arnaiz actuaron como pivotes, con Gemma Gili como enganche. La delantera la formaron Padilla-Bidas, Kanteh y Lucía Moral ‘Wifi’.
El Espanyol salió con Mar Segura bajo los palos. En defensa jugaron Caracas, Ballesté, Júlia Guerra y Paula Perea. Carol Marín ocupó la posición de pivote, mientras que Arola Aparicio, Mar Torrás, Ainoa y Lucía Vallejo se encargaron del centro del campo y del ataque por bandas. L. Chamorro completó la línea ofensiva.
En los primeros minutos, el Espanyol dominó la posesión, pero sin generar peligro real. Fue el Sevilla quien tuvo las primeras ocasiones claras. En el minuto 20, Lucía Corrales estuvo cerca de marcar con un disparo que se fue por poco.
Más tarde, Gemma Gili probó suerte, pero su remate fue atajado sin problemas por Mar Segura. Tras estas oportunidades, el Espanyol tomó la posesión, aunque sin inquietar a Sullastres. Las pericas tuvieron el control del juego pero en posiciones intranscendentes.
En la segunda mitad, el guion del partido no cambió demasiado. El Sevilla controló más el balón, mientras el Espanyol apostó por salir a la contra. La ocasión más clara llegó en el minuto 66. Mar Torrás remató un centro que terminó en gol, pero la jugada fue anulada por fuera de juego.
Esta jugada despertó al conjunto de las de David Losada que volvieron a dominar la posesión, mientras el Espanyol esperaba una ocasión a la contra. El Sevilla se volcó en el ataque en los últimos minutos pero fue incapaz de crear una jugada clara de peligro.
Finalmente, el partido concluyó con un empate sin goles. Ninguno de los equipos logró imponer su juego de forma contundente, dejando un reparto de puntos en un encuentro sin grandes emociones.