El matrimonio ganador de la Gran Cesta de Reyes de la Venta El Paisano, agradecidos con Casariche


Montse y Paco, el matrimonio de Casariche, ganador de la Gran Cesta de Reyes de la Venta El Paisano, no dejan de emocionarse al recordar la oleada de cariño que han recibido de su pueblo tras ganar la famosa cesta. “El mejor regalo es el cariño que nos está demostrando el pueblo, familiares y amigos”, confiesa Paco.
En un pueblo de apenas 5.000 habitantes, donde todos se conocen, el amor y la felicidad compartida han sido sin duda el regalo más valioso para esta familia.
Un negocio de toda la vida
Dueños de la única floristería de Casariche, Montse y Paco llevan años dedicando su vida a vender flores en un negocio que han construido con esfuerzo y dedicación a lo largo de los años. Cada semana, la rutina lleva a Paco hasta Chipiona para reponer mercancías, y es en ese viaje cuando suele pararse a tomar café en la venta El Paisano, donde los camareros, aunque no le conocen personalmente, siempre le han puesto cara por su regularidad. Fue en uno de esos viajes cuando Paco compró la papeleta del sorteo, una costumbre que tiene desde hace muchos años.
La emoción del premio y del pueblo
La vida de la familia dio un giro el 6 de enero al mediodía, cuando sus hijas, mientras organizaban los décimos para el sorteo de Lotería del Niño, encontraron las papeletas del sorteo de la venta. La hija menor del matrimonio decidió comprobar el número y sorprendentemente, era el número ganador.
La reacción de la familia al enterarse estuvo cargada de emoción, su hija pequeña “se puso muy nerviosa” recuerda Paco. Montse, su mujer, “no se lo creía y cuando vio que era verdad se puso a llorar”. Sin embargo Paco, es el que parecía estar algo más tranquilo, aunque ha confesado que “ por dentro estaba súper nervioso y no sabia que hacer”.
En ese momento, ellos no eran conscientes de todo el cariño que les brindaría el pueblo. Lo que parecía solo un premio material pronto se transformaría en una ola de cariño y felicidad que jamás habrían imaginado.
Premios que transforman sueños en realidad
Entre los premios, el que más ilusión les ha hecho ha sido el apartamento en Sanlúcar de Barrameda. Otro premio significativo para ellos ha sido el coche, que ha llegado en el momento perfecto para su hija mayor de 29 años, quien llevaba tiempo aprovechando un vehículo viejo que Paco había desechado. “Le va a venir como anillo al dedo”, confiesa Paco, pues además su hija llevaba tiempo buscando uno nuevo.
Al viaje valorado en 5.000 euros, la familia le ha asignado un destino muy especial: Alemania. Montse es hija de emigrantes españoles, sus padres tuvieron que marcharse a Alemania y ella nació y vivió allí hasta los 6 años. Para Montse, regresar al país donde nació es mucho más que un simple viaje, pues siempre ha soñado con enseñarle ese lugar a sus hijas.
Sin embargo, al tratarse de una familia humilde y autónoma que lleva toda la vida trabajando en la floristería, no siempre es fácil encontrar un hueco y el dinero para hacer un viaje familiar. Desde el primer momento, la familia tuvo claro que sería la oportunidad perfecta para cumplir ese sueño.
Ahora, gracias al premio, podrán caminar por esas calles llenas de recuerdos para Montse y compartir con su familia las historias de su infancia.
Un agradecimiento eterno
Desde que conoció la noticia, Casariche se ha volcado con ellos. Los vecinos han pasado por la floristería para darles abrazos y felicitarlos, según Paco “estos días han sido una auténtica locura”.
La historia de Montse y Paco no es solo un testimonio de suerte en un sorteo de Navidad, sino de alegría compartida por aquellos que día a día nos rodean y nos quieren. Ahora, los vecinos tienen una petición muy clara: que el próximo año sea Paco quien les compre las papeletas en uno de sus viajes a Chipiona.
Y es que como dice el refrán, no hay dos sin tres. Teniendo en cuenta que el premio tocó en Casariche en 2019, y este año a Montse y Paco, ¿por qué no una tercera vez?
Dos ganadores en el sorteo: uno por la web y otro en el restaurante
Este año como novedad, se han realizado dos ediciones de la cesta, una por la página web y otra en el restaurante, ambas con los mismos regalos.
El primer agraciado fue un vecino de Los Palacios y Villafranca, que adquirió su papeleta a través de la página web de El Paisano. El número ganador fue el 56.735, lo que le permitió llevarse el espectacular premio.
El segundo ganador es el mencionado matrimonio de Casariche, que compró su papeleta directamente en el restaurante El Paisano.
La gran cesta de Navidad de El Paisano, nacida en plena crisis del 2008 como una humilde iniciativa para ayudar a quienes más lo necesitaban, se ha transformado en todo un acontecimiento en toda España. Con premios que van desde coches eléctricos hasta apartamentos en la playa, esta iniciativa demuestra que las ideas más sencillas pueden llegar muy lejos.