El cielo no tuvo misericordia con el Miércoles Santo

En la cuarta jornada de la Semana Santa, de nuevo, los partes meteorológicos fueron los protagonistas para desbancar a los nazarenos que debieron hacer su estación de penitencia. Como en los días precedentes, el cielo aparecía mezclado con oscuras nubes, en ocasiones tímidos rayos de sol y algunos chubascos, que al parecer se harían presentes en las horas en las que la Cofradía del Santísimo Cristo de la Misericordia estaría en la calle. Por ello, a las doce de la noche, en el interior de la Colegiata se anunciaba que se suspendía la estación de penitencia. En su lugar, se rezó el Vía Crucis en un ambiente de recogimiento, oscuridad y olor a incienso. Sobre las 2 de la madrugada comenzaba a llover, una hora crucial en la que la cofradía estaría dirigiéndose hacia la carrera oficial, por lo que los hermanos y devotos del Cristo de la Misericordia se consolaban en la decisión tomada. Hasta ahora, no hemos podido ver ningún paso en la Semana Santa de Osuna de 2013.

Este Miércoles Santo, el paso de este extraordinario Crucificado había sido exornado con lirios morados y con los faldones a juego en el color. No pudieron estrenarse las espléndidas bocinas, diseñadas por Fernando Marmolejo en estilo neobarroco, donde aparecen repujadas la corona de espinas, hojas de acanto y cabezas de querubines. Los paños también los ha diseñado el mismo artista y bordados en Alcalá de Guadaira. Sobre terciopelos negros y confeccionados con la técnica de realce, cuenta con cartelas de orfebrería incrustadas donde aparecen los atributos de la Pasión.

Un silencio diferente al de todos los Miércoles Santo asolaba nuestro pueblo, a la vez que entre las empinadas cuestas un eco sordo recitaba el salmo 122: misericordia Señor, misericordia, que estamos saciados de burlas; misericordia Señor, misericordia, que estamos saciados de desprecios.

Antonio Morón Carmona

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Fotos: Valdivia Photographer

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