El brazo de gitano solidario de más de doscientos metros en Morón de la Frontera

Con la llegada de las Fiestas Navideñas, polvorones, mantecados, mazapanes o turrones deleitan nuestro paladar y llenan de sabor las sobremesas familiares.
Sin embargo, desde hace más de 20 años, Morón de la Frontera da comienzo a las fiestas con un dulce diferente. Coincidiendo con el Día Internacional de las Personas con Discapacidad, cada 3 de diciembre la Asociación APADIS organiza su tradicional brazo gitano, donado por Tahona Parrilla y que se ha convertido en un símbolo de solidaridad y unión en la localidad.
Este dulce es el centro de un evento plenamente solidario que se ha convertido ya en una tradición y jornada de apoyo y convivencia para los vecinos de Morón. Desde el Pozo Nuevo hasta el Ayuntamiento, los vecinos del municipio han podido degustar sus 230 metros de brazo gitano, además de un buen ambiente prenavideño desde las 10:00 de la mañana, hora en la que comenzó el corte.
El alcalde de Morón de la Frontera, Juan Manuel Rodríguez, ha querido destacar la importancia y el carácter solidario de esta iniciativa: “Quiero felicitar a la asociación por cosechar un nuevo éxito y mi agradecimiento al pueblo de Morón por responder siempre a esta llamada solidaria”, ha afirmado el primer edil.
Este postre relleno, que se enrolla en forma de cilindro y cuya ración se vendió a un precio simbólico de dos euros, no solo satisface a los golosos, sino que ha servido para recaudar fondos para seguir mejorando la calidad de vida de las personas con discapacidad.
Pero lo más importante es que ha llenado de solidaridad el municipio, una solidaridad que ha ido creciendo con los años desde el primer brazo que se hizo con solo 30 metros, hasta los más de 200 de este año. Esta unión colectiva, que va más allá de la simple compra de un dulce, refleja el espíritu de cooperación que caracteriza a la localidad, haciendo de este evento un ejemplo claro de cómo la unión y el apoyo mutuo pueden marcar la diferencia.
Colaborar para mejorar la vida de las personas, especialmente de quienes más lo necesitan, es sin duda la mejor manera de dar la bienvenida a la Navidad.
