Paco Moraza: «Ser parte de la Centuria Macarena ha sido mi sueño desde niño»
- El legado familiar de Paco Moraza en la Centuria Macarena
- El uniforme de los armaos, tradición y jerarquía en cada detalle del atuendo macareno

Desde El Pespunte hemos tenido la oportunidad de entrevistar a Paco Moraza, capitán general de la Banda de Cornetas y Tambores de la Centuria Macarena. A lo largo de nuestra conversación, nos ha hablado sobre su trayectoria, el significado del uniforme de los armaos y la formación que requiere formar parte de esta prestigiosa banda.
Un legado de generaciones
Desde la cuna, Paco Moraza supo que su destino estaba ligado a la Hermandad de la Macarena. Hermano desde su nacimiento y con una familia profundamente vinculada a la cofradía, su camino hacia la Centuria Macarena estaba escrito desde su infancia. Mi padre era costalero y mi familia entera es macarena. Desde que empecé a tocar, mi ilusión era pertenecer a la Centuria, confiesa.
El uniforme de los armaos, un símbolo de historia y tradición
El uniforme de los armaos es una de las señas de identidad de la Centuria. Su compleja y detallada vestimenta refleja la jerarquía dentro del grupo. Cada casco tiene un número de plumas según el rango, explica Moraza. Desde los capitanes y tenientes, con 27 y 24 plumas, hasta los cabos con 11 y los armaos de raso con 7. La armadura de pecho, adornada con leones en color plata, la gola con lazos de diferentes colores según el rango y la combinación de la nagüeta granate con mallas rosas completan un atuendo lleno de simbolismo. Los músicos llevamos espada e instrumento, mientras que los armaos de lanza portan su escudo y lanza, añade.
Disciplina y formación musical para entrar en la banda
Formar parte de la banda de la Centuria Macarena requiere no solo pasión, sino también talento y preparación musical. Lo primero es saber tocar, ya sea tambor o corneta, detalla Moraza. Para formar parte de los grupos más avanzados, se exige un conocimiento básico de partituras y una buena técnica musical. No es necesario ser profesional, pero sí tener un mínimo de lectura musical. Los más experimentados acceden a las primeras voces de la banda, donde la exigencia es mayor.
Con una vida dedicada a la Centuria Macarena, Paco Moraza sigue llevando con orgullo su uniforme, cumpliendo el sueño de aquel niño que un día soñó con ser parte de los armaos de la Macarena. Su testimonio refleja el compromiso, la disciplina y la devoción que caracterizan a esta histórica formación, manteniendo viva una tradición que se transmite de generación en generación.
