Conoce La Montesa crianza, un Rioja diferente y espectacular
De entre los distintos tipos de vinos que podemos incorporar a nuestra bodega, La Montesa es sin duda una de las alternativas más recomendables, y es que estamos hablando de un Rioja diferente que sorprende y se adapta a cualquier tipo de evento, consiguiendo dar un toque exclusivo a cualquier plato o aperitivo al que acompañe.
Las particularidades de La Montesa crianza
Cuando hablamos de La Montesa, nos estamos refiriendo a un vino fantástico que ha sido creado por la bodega Palacios Remondo, consiguiendo dar a luz un tinto con denominación de origen de La Rioja que además presenta algunas particularidades fantásticas que lo convierten en un caldo completamente diferente a la vez que espectacular y muy exclusivo.
Pocas veces tenemos la posibilidad de probar un vino tinto como este, y es que hablamos de un producto creado a partir de tres variedades principales que son la garnacha, tempranillo y cariñena, consiguiendo de esta forma crear un toque totalmente personal con el que vamos a poder sorprender a nuestros invitados en cualquier tipo de evento que decidamos celebrar, y de igual manera, también se trata de una opción fantástica para poder dar un toque especial a la hora de acompañar a prácticamente cualquier tipo de guiso o asado que incorpore carnes, legumbres y verduras.
Sin duda se trata de un vino fantástico para esta temporada que se acerca, ya que nos permite disfrutarlo con platos de cuchara y, para conseguir poder sacar el máximo partido a todos sus componentes, la temperatura ideal para servir se encuentra entre los 15 °C y los 16 °C, ya que es la horquilla en la que vamos a poder obtener y apreciar mucho mejor todos sus matices y toques delicados, comprendiendo de esta forma las razones por las que estamos hablando de un vino totalmente exclusivo y diferente que marca un antes y un después en los vinos de La Rioja.
Cabe destacar que una de las particularidades que hacen más grande este caldo es el hecho de que todo se produce en una zona que no es tan conocida por albergar vinos de gran calidad, de manera que en cierto modo podríamos estar hablando de un vino que marca las pautas para reivindicar que su localización cuenta con todo lo necesario para garantizar un producto de gran calidad, y que tiene todo lo necesario para competir sin problemas con vinos de cualquier parte del mundo.
Otra de las particularidades y razones de la gran calidad de este producto es el hecho de que en la vendimia se lleva a cabo a mano, y en todo momento se busca reducir al máximo la manipulación mecánica para garantizar un producto tradicional y de gran exquisitez.
Su fermentación se lleva a cabo de forma completamente natural, a la cual le sigue un total de 23 días de maceración y la fermentación que se lleva a cabo en acero inoxidable. Posteriormente se introduce el producto en barricas de roble francés y americano para que permanezca durante 12 meses. Cabe destacar que estas barricas son utilizadas un máximo de tres años y posteriormente proceden a ser sustituidas.
En esencia estamos hablando de un producto de gran calidad que nos muestra una acidez totalmente equilibrada y una fantástica intensidad frutal en la boca, lo cual hace que se adapte a la perfección a prácticamente cualquier tipo de paladar. Su final es largo y presenta una gran elegancia, pero cualquier caso destacamos que su estructura es completa con lo que disfrutamos de la experiencia desde el mismo momento en que empezamos a consumirlo.
Su color es un rojo rubí muy intenso y en cuanto a aromas cuentan con la intensidad perfecta, destacando la naranja, el pomelo y las cerezas, aunque por supuesto, al fondo podemos notar ese fantástico gusto que tan sólo se puede conseguir con una buena madera.
Podéis encontrar más información interesante acerca de este vino directamente a través de https://www.vinosofos.com/tinto/5237-la-montesa.html
Conoce mejor la bodega Palacios Remondo
Este fantástico vino ha sido creado en Palacios Remondo, una bodega que fue fundada en el año 1948 y que cuenta con viñedo propio que alcanza una extensión de 100 ha.
A manos de los enólogos Álvaro Palacios y Javier Gil se llevan a cabo todos los procesos buscando en todo momento garantizar la máxima calidad y la mejor gestión del producto, logrando de esta forma dar con una mezcla verdaderamente asombrosa y criada con todo el cariño para conseguir esos matices que hacen de La Montesa un vino distinto y cada vez más apreciado.
Cabe destacar que estamos hablando de una familia que tiene en su haber una larga tradición vinícola, ya que durante cuatro generaciones han estado evolucionando y buscando satisfacer los paladares más exigentes, esmerándose en la selección de las variedades más tradicionales de La Rioja y haciendo de la vinicultura una parte esencial en sus vidas.
Esta bodega la podemos encontrar en la parte oriental de La Rioja y cuenta con la característica de hacer pendiente hacia la zona sureste. Con una altitud de 550 m asienta sus plantas sobre un suelo de monte de escasa materia orgánica y con un gran volumen de piedra rodada.
Además, las escasas lluvias y el ligero efecto del clima mediterráneo hacen que las condiciones para que se desarrollen las parras sean las idóneas, consiguiendo de esta forma una materia prima de enorme calidad para crear un vino espectacular como el presente.
Por supuesto, todo esto no se podría conseguir sin el exhaustivo control tanto del crecimiento como del desarrollo, recolección, selección y manipulación a través de distintos sistemas como el prensado, buscando en todo momento reducir al máximo la utilización de medios mecánicos.
En esencia, hablamos de un lugar perfecto para poder obtener un producto de enorme calidad y que, en buenas manos como es el caso de la bodega Palacios Remondo, se convierte en un vino espectacular y que no deja indiferente a nadie.
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