
Estados Unidos ha intensificado su presencia en Europa ante el repunte del conflicto entre Irán e Israel. El despliegue incluye aviones cisterna y bombarderos estratégicos, que han aterrizado en bases clave del continente, entre ellas la de Morón de la Frontera (Sevilla). Según informó la web especializada Flightradar24, una treintena de aeronaves —mayoritariamente KC-135 y KC-46A— partieron desde territorio estadounidense en la noche del domingo 15 de junio. Su rumbo: el este del Atlántico.
Durante el lunes, cuatro de esos aviones cisterna se encontraban en las inmediaciones o aterrizaron directamente en la base sevillana. Estos movimientos se enmarcan en una operación logística de gran alcance. La intención es tener desplegados medios de reabastecimiento que permitan a los cazas y bombarderos operar con más autonomía desde bases en Europa hacia Oriente Medio, en caso de que la situación escale.
La base de Morón, por su situación geográfica estratégica —entre el Atlántico, el Mediterráneo y África—, es un punto de tránsito habitual para misiones de largo alcance. Estados Unidos mantiene allí un destacamento permanente, amparado por el convenio bilateral con España.
España confirma el uso militar de Morón y Rota
La ministra de Defensa, Margarita Robles, ha confirmado este miércoles que Estados Unidos está utilizando las bases de Morón (Sevilla) y Rota (Cádiz) para operaciones de apoyo. Robles ha insistido en que esta cooperación se produce «con arreglo a los acuerdos bilaterales y tratados internacionales», en referencia al marco de la OTAN y al convenio de defensa suscrito entre ambos países.
Según fuentes militares, la base estaría siendo empleada principalmente como escala logística para el traslado de material y efectivos hacia terceros países. Algunas fuentes locales apuntan a un aumento del tráfico aéreo en los últimos días, aunque sin detallar el tipo de misiones implicadas.
Tensión máxima entre Irán, Israel y EE.UU.
En paralelo, el conflicto entre Irán e Israel entra en su sexta jornada de ataques cruzados. Más de 200 personas han muerto en Irán y al menos 24 en Israel, según datos oficiales. Estados Unidos, aliado tradicional de Israel, ha advertido de represalias si sus intereses en la región son atacados. El presidente Donald Trump ha pedido la rendición incondicional de Irán y ha prometido una respuesta “como nunca antes se ha visto” si se cruzan ciertas líneas.
Washington ha desplegado portaaviones, destructores y unidades aéreas en puntos clave del golfo de Omán y el mar Rojo. También ha autorizado la salida voluntaria de familias de militares destinados en bases de la región. El Pentágono, de momento, insiste en que no se han lanzado operaciones ofensivas directas contra Irán, pero no descarta acciones si la situación se agrava.
Desde Teherán, el líder supremo Ali Jameneí ha respondido asegurando que Irán “no se rendirá” y que cualquier ataque tendrá consecuencias “irreparables”.
Morón, por ahora, sin señales de alarma
La Base Aérea de Morón de la Frontera no ha registrado movimientos extraordinarios durante el miércoles 18 de junio, según ha podido confirmar El Pespunte. Vecinos de la zona aseguran que no se ha percibido el sonido habitual de los vuelos militares. “Hoy no se ha oído nada. Si algo se mueve aquí, se nota”, comentan.
Datos de seguimiento aéreo consultados por este medio confirman que el martes 17 aterrizaron dos Eurofighter (AME1123 y AME1125) y un A400 del Ejército del Aire procedentes de Gran Canaria. Este último, identificado como DUMBO02, despegó posteriormente hacia Zaragoza. Se trata de movimientos rutinarios dentro de la operativa nacional, sin señales de despliegue extraordinario.
Aunque las tensiones geopolíticas sitúan a Morón en el centro del mapa militar, la base permanece —por ahora— en calma. Ni actividad inusual ni vuelos fuera de lo habitual. En el sur de España, la guerra sigue siendo, por el momento, un ruido lejano.
