Arahal nombra Hijo Adoptivo a Miguel Ángel García, el sacerdote que más años lleva en la localidad
- El Ayuntamiento prepara un acto que se celebrará en los próximos días para entregar al cura este reconocimiento y agradecer sus servicios a la comunidad durante 45 años
Miguel Ángel García Badía, el sacerdote que más años se ha llevado en Arahal, será reconocido próximamente como Hijo Adoptivo del pueblo. El pasado sábado cumplió 74 años y el grupo de feligreses más cercano a la parroquia le organizó una fiesta sorpresa como previo reconocimiento a su labor.
El párroco de la iglesia Nuestra Señora de la Victoria tiene conocimiento de este nombramiento sólo de manera extraoficial, aunque este medio ha podido confirmarlo oficialmente. El Ayuntamiento de Arahal lo ha nombrado Hijo Adoptivo, después de que un grupo de feligreses de su parroquia lo solicitara. El reconocimiento se realizará el 1 de abril a las seis de la tarde.
Miguel Ángel García le quita importancia a su labor que es inestimable para el resto de la sociedad arahalense. «Uno no espera cobrar de la sociedad este tipo de servicio, es lo que hay que hacer y se hace», dice. De hecho, bromea sobre la fiesta sorpresa que le han organizado por su cumpleaños. «Llegué y dije pero ¿esto que es?».
Hijo adoptivo: Agradecimiento
Sí reconoce a El Pespunte que está muy agradecido por este reconocimiento pero que siente cierta «vergüenza». Esta es la reacción inmediata cuando se lo comunicaron, «porque uno acepta que es una persona pública en el diario, pero esto no es diario, es extraordinario«.
Llegó a Arahal con 29 años y junto a otros dos sacerdotes que quedan en el recuerdo, Alfredo y Manuel. Los tres llevaban las tareas de las dos parroquias de Arahal, Santa María Magdalena y Nuestra Señora de la Victoria. Desde hace años, se centra sólo en una de ellas, en el barrio de la Victoria donde está muy arropado por toda la feligresía.
Miguel Ángel es muy conocido, no en vano lleva más de la mitad de su vida en Arahal. Ha sido profesor de Religión en el IES Ál-Andalus, actividad de la que se jubiló a la edad requerida, pero sigue atendiendo las labores de su parroquia, es parte del alma de un barrio.
Pero, además, ha sido un sacerdote revolucionario en cuanto al uso de las nuevas tecnologías, fue el primero que ofició misa retransmitiéndola en directo por las redes sociales y el primero que instaló un sistema de emisión por varias televisiones en el interior del templo.
Uno de los últimos actos que ha participado fue el sábado en la bendición del retablo recién restaurado de la iglesia del Santo Cristo, presidida por el arzobispo de Sevilla, José Ángel Saiz Menese.
