Aparecen los cuerpos sin vida de los dos niños desaparecidos en Torrent (Valencia)
- La familia y su abuela de Marchena, los ha buscado sin descanso desde que la fuerza del agua se los arrancara de los brazos a su padre Víctor Matías, que se agarró a la rama de un árbol
Redactora de El Pespunte.
Los cuerpos sin vida de Rubén e Izan, los dos niños de 3 y 5 años que desaparecieron en Torrent (Valencia) arrastrados por la riada el día de la dana cuando estaban con su padre, han sido encontrados finalmente, según han informado este miércoles fuentes municipales a la Agencia EFE.
La familia acudirá este miércoles a los juzgados a reconocer los cuerpos. Al parecer han sido encontrados en dos localidades diferentes, ubicadas a unos kilómetros de Torrent, según han señalado las mismas fuentes.
Numerosas personas, entre vecinos, miembros de equipos de rescate, sanitarios, buzos y voluntarios, llevaban días buscando a los pequeños.
Búsqueda
La familia y su abuela de Marchena, Antonia María Jiménez, los ha buscado sin descanso desde que la fuerza del agua se los arrancara de los brazos a su padre Víctor Matías, que se agarró a la rama de un árbol. El padre también resultó herido al ser arrastrado después de que se le cayera encima parte de las paredes y techo de su vivienda al recibir el impacto de un camión.
Incluso habían iniciado una campaña de recogida de fondos para que no se abandonara la búsqueda de los pequeños. Su abuela ha sido la principal protagonista de esta búsqueda desesperada desde que desaparecieron el pasado 29 de octubre, trágico día que se ha llevado la vidas de más de dos centenares de personas en varias poblaciones de Valencia.
El padre de los pequeños estaba ingresado en el hospital debido a las heridas que le produjeron los distintos elementos arrastrado por las aguas torrenciales. La abuela dijo entonces no necesitar nada, sólo que aparecieran “mis niños”. Reconoció a este medio que no tenía esperanzas de encontrarlo con vida, pero desde que desaparecieron no han dejado de buscarlos. Ahora la familia está sumida en el dolor por su pérdida.
