Antonio Morón analizó la historia de la imagen de la Virgen del Mayor Dolor

Con la ceniza todavía sobre la faz de los asistentes y bajo el ambiente propio del día en el que comienza la Cuaresma, Antonio Morón Carmona, historiador, experto en museología y sobre todo un gran cofrade, hizo su particular apertura de esta etapa de preparación previa a la Semana Santa con una conferencia que se enmarcaba dentro de los actos programados con motivo del Centenario de la hechura de la imagen de la Virgen del Mayor Dolor.
En la Iglesia de Consolación y organizado por la hermandad de la Pax de nuestro pueblo, Antonio disertó sobre la historia de una imagen que centra muchas miradas la noche del Viernes Santo ursaonés. Fue en el 1914 cuando la Virgen del Mayor Dolor llegó a Osuna y tras estos 100 años son muchas las historias y los sentimientos que esta imagen ha llegado a acaparar.
Tras una sencilla, genial y completa presentación de su amigo Álvaro Reina, Antonio fue mostrando a los asistentes una gran cantidad de imágenes -algunas de ellas inéditas y otras muchas desconocidas para la gran mayoría- que junto con su magistral explicación, arrojaron luz a muchos de los aspectos que rodean la historia de esta imagen.
Antonio comenzó haciendo un análisis comparativo de varias imágenes tanto de Osuna como de otras ciudades que talló el artista valenciano Vicente Tena y relacionando las semejanzas que pudieran tener con la Virgen del Mayor Dolor. De la misma manera, el historiador mostró similitudes de esta talla con obras referencias del barroco, mostrando cómo fue acompañada a lo largo de los años, por ejemplo, con el complemento de un pañuelo, el mismo detalle que ya se usara en obras pictóricas del barroco de la nobleza que denotaba distinción. Así como la postura de las piernas traducen la curva praxiteliana que se inventó en el arte clásico griego en el siglo I a.C. O la importancia de que la Virgen del Mayor Dolor llevase las manos posadas, una sobre otra, encima del pecho, lo que la conecta con el resto de las Dolorosas de Osuna, que se caracterizan porque la mayoría llevan las manos unidas.
Antonio Morón hizo un repaso desde la talla de la Virgen del Mayor Dolor hasta los detalles más significativos de los pasos que ha tenido, pasando por esos detalles que a muchos se nos pasaban por alto e incluso se destacó la importancia que tuvo en el desarrollo histórico de la imagen de la Virgen del Mayor Dolor de Osuna la figura del Arcipreste Govantes quien con sus conocimientos y buen gusto supo dotar a esta imagen de una categoría propia de las obras más destacables del barroco.