Adiós al «Bobi de Osuna»
El pasado viernes día 2 nos dejó el cantaor Enrique Díaz Marín «Bobi de Osuna» a la edad de 94 años. Un andaluz que llevaba muy a gala haber nacido en la Villa Ducal.
Desde que dejara su pueblo a primeros de los 60 para afincarse en Hospitalet de Llobregat nunca dudó en impartir su particular sapiencia flamenca sin la menor pretensión. Jamás escatimó esfuerzos para colaborar y repartir sus cantes de peña en peña o donde se le hubiera solicitado, en ellas derrochó generosamente la esencia más genuina y ancestral de la música de su tierra. La difícil tarea de desgarrar tercios en la garganta y expresar lo profundo y trágico de un cante por seguirilla.
Enrique “Bobi de Osuna” fue un cantaor viejo desde joven, un hombre que suplía la escasez de facultades con la enjundia que empleaba al saber que en el cante no hay medias tintas y que los méritos de este arte se basan en la superación de los límites.
Cualidades y conocimientos adquiridos en la adolescencia en su querida Osuna al lado de su amigo José moreno el “Lele” y buenos artistas que despuntaban: Jarillo, Chato o Chiquito etc. Así fue Enrique, un hombre sencillo que ofreció su sabiduría y humanidad jonda de la manera más anónima.
Descanse en paz.
Antonio Moreno Pérez
